El gobierno entrante de Donald Trump podría deportar en las próximas semanas a más de 50,000 personas que tiene identificadas y procesadas como “ilegales” en su país, de acuerdo con una fuente de la administración federal estadounidense actual que pidió el anonimato.
La cifra representa casi 20% del total de las 271,484 personas que fueron deportadas el año pasado, según el reporte anual del Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos.
Trump hizo de la migración y la deportación masiva de personas que residen de forma irregular en su país un eje de su campaña y desde su victoria electoral del 5 de noviembre ha hecho hincapié en que llevará a cabo redadas masivas en ciudades de todo el país.
Pese a que las deportaciones masivas de inmigrantes traerán costos importantes para la economía estadounidense, de acuerdo con expertos, el mandatario está firme en que una de las primeras “victorias rápidas” que busca es alrededor de ese tema, añadió la fuente.
El líder de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, afirmó en un programa de televisión que está dispuesto a apoyar el costo masivo de la implementación de las deportaciones planteadas por Trump.
“No se me ocurre una mejor inversión, dólar por dólar, que restaurar la seguridad y bienestar del país”, aseveró este domingo Johnson en “Meet the Press” de la cadena NBC.
Trump asumirá mañana como presidente 47 de Estados Unidos y se anticipa que como parte de la oleada de órdenes ejecutivas que firme se incluyan varias en materias de migración, financiamiento para la frontera y recursos para las deportaciones.
