El jueves, los equipos de rescate encontraron los cadáveres de una pareja de ancianos en su casa inundada de Fernao Ferro, al otro lado del río Tajo, en Lisboa. Al parecer habían estado durmiendo y no pudieron huir cuando el agua subió durante la noche. Y el sábado, un tornado también azotó Albufeira, en el sur de Portugal, según informaron los servicios de emergencia.
En un hotel cercano, 28 personas resultaron heridas, y dos de ellas fueron hospitalizadas con lesiones graves.
En un comunicado emitido el sábado, el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, expresó "su solidaridad con la familia de la víctima fallecida" en Albufeira y deseó una pronta recuperación a los heridos.
El servicio meteorológico portugués IPMA declaró en alerta ámbar, su segundo nivel de alerta más alto, todo el Algarve y los distritos de Beja y Setúbal.
En Gran Bretaña, graves inundaciones afectaron el sábado a la ciudad de Monmouth y sus alrededores, en el sureste de Gales. El Servicio de Bomberos y Rescate del Sur de Gales dijo que estaba llevando a cabo rescates, evacuaciones y controles de bienestar.
"La tormenta Claudia ha causado importantes inundaciones en algunas partes de Gales durante la noche, que siguen afectando a hogares, empresas, transporte e infraestructuras energéticas", dijo un portavoz del gobierno galés.