Publicidad
Publicidad

La joven que 'cultivó' el debate sobre la regulación de la marihuana

En junio, Mariana Sevilla contactó senadores para hablarles de la necesidad de dejar atrás el prohibicionismo. Este mes, sus esfuerzos ayudaron a que se aprobara una reforma sobre cannabis medicinal.
vie 23 diciembre 2016 07:00 AM
La semilla de la regulación
La semilla de la regulación Senadores de distintas fuerzas políticas fueron invitados por Mariana Sevilla a sembrar semillas de cannabis. (Foto: Facebook/Instituto Mexicano del Cannabis)

Mariana Sevilla es comunicóloga y fotógrafa y cursa una maestría en Comunicación Política. Consume marihuana desde hace más de una década y, hace seis meses, decidió 'sembrar' en el Poder Legislativo el debate sobre la regulación de la cannabis.

En junio pasado, luego de que el presidente Enrique Peña Nieto presentara una iniciativa para legalizar el uso medicinal de la hierba, Mariana acudió al Senado para hablar del tema. Ahí conversó con cinco legisladores de diferentes partidos —Roberto Gil (PAN), Mario Delgado (PRD), Alejandro Encinas (PRD), Martha Tagle (independiente) y Cristina Díaz (PRI)—, a quienes pidió que sembraran semillas de la planta.

¿Su objetivo? Atraer la atención de los senadores, más aún luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) entregara un amparo a cuatro ciudadanos, integrantes de la Sociedad Mexicana de Autoconumo Responsable y Tolerante (SMART), para permitirles el consumo recreativo de marihuana.

"Sembraron los cinco senadores y yo llegué muy contenta con mi maceta a la casa, como niña chiquita, como si hubiera hecho una travesura, y a los días empezaron a crecer, germinaron estas semillas, y era un poco como esta carga simbólica de 'hay que sembrarlo, las cosas toman tiempo y hay que cuidarlas, procurarlas y ayudarles a crecer'", recuerda.

Para la joven de 29 años, este hecho representaba la esperanza de empezar a cambiar el enfoque prohibicionista en torno a la hierba. Seis meses después, el pasado 13 de dicimbre, sus anhelos y los de otros partidarios de la regulación derivaron en un primer logro: la aprobación en el Senado de una reforma que permite el uso de marihuana con fines medicinales, una reforma que, si bien los activistas consideran pequeña, también es vista como un primer paso en esta materia.

Lee: Reforma sobre marihuana, un avance con alcances limitados: activistas

Publicidad

En honor a los senadores que la escucharon, y quienes han presentado iniciativas para regular la cannabis, Mariana nombró a las tres plantas que germinaron como los propios legisladores: Roberta, Cristina y Martha. La primera incluso ya dio vida a otras dos plantas, que crecen a la par de la lucha de diferentes colectivos por modificar la visión de México en torno a la hierba.

Algunos de estos grupos son México Unido Contra la Delincuencia (MUCD), el Instituto Mexicano del Cannabis y el Movimiento Cannábico Mexicano, del que Mariana forma parte.

"Para mí se planteó un reto, porque una de las cosas principales que estamos pidiendo como activistas es el autocultivo; entonces, también ha sido un periodo de aprendizaje de cómo puede tener uno su autocultivo, cómo preparar la tierra y cuidar las plantas", señala la activista.

Lee: Grace, el caso que abrió la puerta al uso medicinal de marihuana

Los motivos de Mariana

Mariana tenía 13 años cuando por 27 pesos pudo conseguir marihuana con un dealer que operaba en un parque de la Condesa. Luego, a los 16, fue extorsionada por la policía cuando en una revisión a ella y a sus amigos les encontraron una dosis. Cinco años después, fue detenida durante un viaje a Holanda porque las autoridades pensaban que transportaba droga para traficarla.

Para ella, estos hechos son sólo una muestra de las consecuencias negativas de la política prohibicionista, que en México derivó en la llamada 'guerra' contra el narcotráfico.

En 2012, incluso, dos amigos de Mariana murieron en el contexto de esta estrategia gubernamental contra el narcotráfico, un suceso que la joven describe como "el punto de quiebre" que la llevó a emprender una lucha por la regulación del consumo de la marihuana.

Tal compromiso, dice, cobró todavía más forma durante un viaje que hizo a Chicago, en Estados Unidos, en el cual se encontró con la caravana del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.

"Los acompañé en la segunda mitad de la caravana, en Chicago, en Nueva York, en Baltimore y en (Washington) DC. Para mí fue muy terapéutico ver que mi unica opción no era quedarme con los brazos cruzados, conocí a mucha gente que hoy sigue trabajando por el tema, como el colectivo ReverdeSer y Pepe (Rivera), del Instituto Mexicano del Cannabis, que fue quien me contectó con la senadora Martha Tagle", recuerda.

Ese viaje fue un "parteaguas" para Mariana, pues también conoció a un grupo de expolicías que conforman el grupo Law Enforcement Against Prohibition (LEAP), quienes le entregaron una placa en la que le hicieron jurar que haría todo lo posible para luchar contra la prohibición. LEAP está integrado por exagentes estadounidenses que consideran que la estrategia prohibicionista ha sido inútil y ha dejado más daños que beneficios.

A su regreso a México, con el inicio de su maestría y convencida de que podría promover un cambio en la mentalidad sobre la marihuana y su consumo, Mariana decidió poner manos a la obra. Para ello, inició una investigación que la ha llevado a conocer los modelos de legalización implementados en Uruguay y Denver, los cuales le han servido para que el tema por fin 'germine' en la agenda legislativa del país.

Recomendamos: 10 voces opinan sobre los 10 años de 'guerra' contra el narco

Estrategia floreciente
De las semillas que los senadores sembraron germinaron tres y Mariana logró que otras dos pudieran desarrollarse; una ya está cosechada.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad