La violencia y el crimen obligan al cierre de escuelas en Guerrero
La violencia, la extosión, amenazas y secuestros que se viven diariariamente en la región de Tierra Caliente en Guerrero, han provocado el cierre masivo de escuelas en diversas comunidades del municipio de San Miguel Totolapan, lo que ha dejado sin clases alrededor de 1,700 alumnos.
De acuerdo con la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) son 43 los planteles que se encuentran cerrados, luego de que profesores decidierán interrumpir las clases para pedir que las autoridades les garanticen su seguridad, pero cifras de los pobladores y del Movimiento por la Paz —un grupo de autodefensa creado en diciembre en este municipio— señalan que son 108 escuelas en paro indefinido.
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A pesar de la variación de cifras, tanto el gobierno de Guerrero como el grupo comunitario coinciden con la causa: la violencia que han provocado miembros de la delincuencia que operan en al zona.
San Miguel Totolapan es uno de los municipios más extensos de Guerrero y que conecta con la sierra, por lo que muchos de los planteles educativos están ubicados en comunidades altas y alejadas de la sierra, principal área de siembra y cosecha de amapola de todo el territorio guerrerense.
Debido a ello, los grupos delincenciales luchan para acaparar la droga que llega principalmente a Estados Unidos.
“Por eso es una zona tan peleada, por eso se están peleando cada territorio”, acepta en entrevista el vocero de Seguridad de Guerrero, Roberto Álvarez Heredia.
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De acuerdo con cifras del gobierno del estado, en el 2016 se registraron 2,213 en homicidios dolosos en el estado; de ellos 80 ocurrieron en nueve municipios que conforman la Tierra Caliente. Los municipios de esta zona con el mayor número de homicidios dolosos en la fueron Coyuca de Catalán y Arcelia con 31 y 20 homicidios respectivamente, mientra que en San Miguel Totolapan se registraron 8 homicidios dolosos.
nullEn entrevista telefónica, el delegado educativo en la región de Tierra Caliente, Timoteo Arce, señala que son 200 profesores los que decidieron parar labores por la situación de violencia.
Los profesores exigen al gobierno del estado seguridad, tanto al interior de los planteles, como en el traslado que deben hacer cada día de la casa al trabajo y los maestros están decidos a permanecer con el paro hasta que se capture a Reybel Jacobo de Almonte, el Tequilero a quien culpan por la violencia.
“Hasta el día de hoy son 108 escuelas que se suman al paro laboral debido a la nula respuesta del gobierno del Estado. Queremos decirles que estas escuelas que día a día se suman, han sido afectadas por este grupo delictivo de Los Tequileros”, se señala en un video del grupo Movimiento por la Paz.
En una la reunión el pasado 21 de febrero, entre autoridades de los tres niveles de gobierno maestros e integrantes del grupo de autodefensa, los pobladores dieron directamente al secretario de Educación Guerrero, José Luis González de la Vega Otero y al secretario de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes, los testimonios de lo que han padecido.
Uno de los reportes de esa reunión que tiene la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero, (Coddehum), describe testimonios de comerciantes, quienes pagan derecho de piso, así como de maestros, quienes han sufrido secuestros e incluso violencia sexual.
Así también como padres de familia que han decidido no llevar a sus hijos a la escuela, e incluso buscan abandonar sus comunidades.
“Nadie nos garantiza que si salimos a trabajar vamos a regresar sanos y salvos”, dijo una maestra en esa reunión.
Un terror extendido
La región de la Tierra Caliente no es la única con problemas de inseguridad, de acuerdo con un estudio interno de la SEG que se encuentra en poder de la Coddehum, que señala que existen otras 1,300 escuelas en la región Centro del estado con problemas de cobro de piso y violencia.
El diagnóstico —en el que existen también reportes “muy graves” de bullying— abarca en su mayoría a jardines de niños y primarias del municipio de Chilpancingo, capital del estado, en donde hay ocho colonias consideradas como las más violentas.
El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Ramón Navarrete Magdaleno, informó en días pasados que ese es solo un primer diagnóstico: “son los primeros datos que tenemos”, dijo.
El vocero de Seguridad de Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, explicó que en la reunión del 21 de febrero determinaron que 300 miembros del Ejército, policías estatales y federales resguardarían San Miguel Totolapan, a fin de brindar mayor seguridad a la población y que las escuelas pudieran abrir; pero esto no ha ocurrido.
“Se iba hacer un análisis, y un acuerdo escuela por escuela (…) hay zonas en donde hay problemas de seguridad, no es la propia escuela, sino cuando los maestros se van los viernes hasta la cabecera municipal de San Miguel Totolapan.
“¿Cómo garantizar el camino?, ese recorrido que hacen, por ejemplo, puede ser de tres horas hasta llegar a la cabecera y que no tengan ningún problema. Los acuerdos eran que la Policía del Estado y el Ejército iban a resguardar”, explicó Álvarez quien dio que se trabaja en identificar los horarios de cada uno de los maestros para acordar recorridos de vigilancia.
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Los Tequileros
Aunque desde el 2015 el nombre del grupo criminal de Los Tequileros se ha escuchado por llevar a cabo secuestros masivos, pobladores afirman que desde hace ocho años han padecido un alto nivel de inseguridad en las distintas comunidades de San Miguel Totolapan.
El vocero de Seguridad de Guerrero, Roberto Álvarez explicó que este grupo criminal está identificado y pertenecen a la comunidad San Antonio La Gavia, ubicada sobre un cerro a solo 15 minutos de la cabecera municipal.
“Está a 15 minutos, es donde dicen que se encuentran ahí las personas que son parte de esta banda y que son los que mantienen azolada a la cabecera y a toda la región, según el Movimiento por la Paz”, dijo.
De acuerdo al reporte de seguridad estatal, los Tequileros, dirigido por Reybel Jacobo de Almonte el Tequilero se conformó cuando se fracturó su relación con su ahora grupo antagónico, que están vinculados con la Familia Michoacana.
“Siguen las instituciones trabajando para agarrar al Tequilero y a sus secuaces, el trabajo sigue”, insistió el vocero de seguridad, quien agregó que ese grupo criminal no solo se dedica a secuestros masivos y extorsiones, también a la siembra y trasiego de la amapola.
De acuerdo con un informe de seguridad estatal, Jacobo de Almonte estuvo durante muchos años vinculado con el grupo que dirigía Jhonny Hurtado Olascoaga, el Pez, y formaban parte de la Familia Michoacana en su ingreso a Guerrero, por la región de la tierra caliente, pero se dividieron iniciaron una pelea férrea por la zona.
El informe señala que el grupo el Tequilero opera solo en los municipios de Arcelia, Ajuchitlán del Progreso y en San Miguel Totolapan, de donde es originario y es buscado por las autoridades por delitos como extorsión, secuestro y homicidio de varias personas.
El exalcade y hoy diputado local del PRI, Saúl Beltrán Orozco, es investigado por la Fiscalía de Guerrero por presuntos nexos con el capo, y enfrenta un proceso de desafuero en el Congreso estatal, por una orden de aprehensión girada en su contra por el delito de homicidio.
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Se indagará caso por caso: Astudillo
Ante el cierre de los planteles en la región de la Tierra Caliente y el diagnóstico de seguridad en las escuelas de zona Centro del estado, el gobernador Héctor Astudillo respondió que se indagará caso por caso.
También dijo existe un planteamiento con el Grupo de Coordinación Guerrero (GCG), en donde está incluido el Ejército mexicano, para que se dé un regreso paulatino en los planteles en paro indefinido del municipio de San Miguel Totolapan.
“Sin duda hay que investigarlo, cada uno de los casos se debe investigar para eliminar cualquier problema que evite la educación”.
“No vamos a cansarnos de insistir en que se regrese a las aulas, así como no vamos a dejar de insistir en detener al delincuente. Estamos haciendo un llamado y la intención es que se regrese a las clases poco a poco”, insistió el mandatario.