El gobierno de México detalla su plan para revolucionar la forma de enseñar

El gobierno de Enrique Peña Nieto revelará este lunes su nuevo modelo educativo, un esquema cuyo primer avance se dio a conocer a mediados de 2016 y con el cual las autoridades buscan revolucionar la forma de enseñar en México.

Aurelio Nuño, titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), explicó esta semana que el modelo se dividirá en los cinco ejes presentados el año pasado: desarrollo curricular y cambio pedagógico, escuelas al centro, profesionalización de los maestros, equidad e inclusión y la nueva gobernanza educativa.

Lo que ahora se hará será detallar en qué consiste cada uno de estos pilares y cuál será su ruta de implementación, la cual se espera se formalice en el ciclo escolar 2018-2019.

A decir de Nuño, el objetivo central del nuevo modelo es que en todas las escuelas del país se deje a un lado la memorización para que los niños aprendan a aprender y que esto, a su vez, ayude a combatir la desigualdad social.

Para ello, las autoridades buscan que el Estado recupere la rectoría en materia educativa, impulsar el desarrollo de los profesores a través de evaluaciones que permitan que en las aulas únicamente estén los docentes mejor preparados, y fomentar la reorganización de los planteles para que tengan mayor autonomía de gestión y menos carga burocrática.

Según la SEP, en este documento se recogen los más de 300,000 comentarios y opiniones de académicos, maestros y otros sectores.

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¿Qué se espera?

Nuño explicó a medios el 7 de marzo que, después de la presentación del documento, las autoridades elaborarán y publicarán los nuevos planes de estudio y los nuevos libros de texto; también se informará y capacitará a todos los maestros sobre el nuevo modelo, para que conozcan el enfoque pedagógico y las diversas tácticas incluidas en él.

El funcionario dijo que, por recomendación de organizaciones y expertos, en la estrategia se incluyó un cronograma de todo lo que se tiene que hacer para llegar a la implementación en 2018, al cierre del sexenio del presidente Enrique Peña Nieto.

Hace cuatro años, cuando Peña Nieto asumió el poder, aseguró que la educación sería una de sus prioridades. Incluso, su primera gran iniciativa de reforma fue en materia educativa y con ella logró establecer evaluaciones obligatorias para la asignación de plazas docentes y la permanencia de los maestros en ellas.

Sin embargo, legisladores y especialistas han señalado que ese es sólo un aspecto de la política educativa y que hasta ahora falta conocer las medidas para renovar la enseñanza y los contenidos.

En diciembre pasado, el Programa Interdisciplinario sobre Política y Prácticas Educativas (PIPE), del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), entregó al gobierno el resultado de los foros que se realizaron entre julio y agosto para enriquecer el modelo educativo.

Entre las peticiones más comunes estaban una mayor consistencia en las finalidades, referencias teóricas, un diagnóstico sobre reformas educativas anteriores y más información sobre los ajustes institucionales para la implementación.

Los retos a enfrentar

Para hacer la transformación que se espera en el sistema educativo, organizaciones y expertos han señalado algunos aspectos que se deben tomar en cuenta en este nuevo modelo, por ejemplo, en inclusión y alcance.

De acuerdo con Elisa Bonilla, directora de Desarrollo Curricular de la SEP, a naciones como Japón les tomó al menos 40 años cambiar sus sistemas de educación, por lo que no se espera que en el caso de México sea distinto.

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“Sabemos que cambiar la educación es cambiarnos a nosotros y, en ese sentido, es una cosa de largo aliento”, dijo la funcionaria en un evento reciente, en el que detalló que al inicio del próximo ciclo escolar los planes y los documentos para cada perfil docente estarán disponibles en línea para que el magisterio se vaya “familiarizando” con ellos.

En cuanto a la inclusión, el director general de Mexicanos Primero, David Calderón, consideró que tocar este punto en el documento representa un cambio positivo, pero aún es insuficiente para garantizar que todos los niños vayan a la escuela.

"Hay dos o tres menciones a la inclusión (en el modelo educativo), autonomía curricular y hay espacio en la carga horaria para lo socioemocional, y se plantea que habrá un cuidado especial para temas de inclusión de personas con discapacidad", dijo durante la presentación del informe "Tod@s. El estado de la educación en México 2017".

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A su vez, la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) señaló que con el nuevo planteamiento se deben corregir diversos problemas, como la violencia escolar y la falta de aprendizaje de los menores, y se debe tomar en cuenta a quienes sean repatriados de Estados Unidos por el gobierno del republicano Donald Trump.

“Si logramos una estrategia adecuada en educación, podremos facilitar mejores condiciones de vida para todos los mexicanos, por esta razón nuestro país debe poner énfasis en este tema aplicando mayores recursos sociales, económicos y políticos”, dijo Consuelo Mendoza García, presidenta de la organización.