La Ciudad de México obliga a Six Flags a cerrar su delfinario
El delfinario de Six Flags México vive sus últimos días. La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) aprobó este martes una reforma que prohíbe la celebración de espectáculos con cualquier tipo de mamíferos marinos, incluidos los delfines.
La reforma a las leyes de Celebración de Espectáculos Públicos del Distrito Federal y Protección a los Animales de la Ciudad de México obligará al cierre del único delfinario abierto en la capital del país, localizado en el parque temático del Ajusco.
“Es una prohibición específica para la exhibición de mamíferos, que incluye específicamente a los delfines, en cualquier espectáculo itinerante o fijo. Esto nos da la pauta para ordenar el cierre del delfinario de Six Flags, así como impedir la llegada de cualquier delfinario a la ciudad”, dijo a Expansión el asambleísta del Partido Verde Xavier López Adame, impulsor de la iniciativa.
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El diputado local aseguró que el delfinario del parque temático es considerado uno de los seis peores de América del Norte, por su espacio reducido y por las opciones que o frecen a los animales.
“Se tienen de tres a seis meses para el cierre definitivo del delfinario. Se tiene que discutir con Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) su reubicación ya sea a un santuario o a otro delfinario que tenga mejores condiciones, que están fundamentalmente en Quintana Roo”, explicó López Adame.
El presidente de la Comisión de Medio Ambiente de la ALDF dijo que a diferencia de lo que pasó con la prohibición del uso de animales en circos , que llevó al abandona y a la muerte a miles especímenes, los delfines de Six Flags tendrán un buen destino, pues están plenamente identificados para su monitoreo.
Expansión contactó a Six Flags México, pero la empresa señaló que no tiene ningún comentario por el momento.
López Adame recalcó que la Ciudad de México no tiene las condiciones para alojar mamíferos marinos en cautiverio.
“La Ciudad de México está a 2,500 metros sobre el nivel del mar, tiene espacios mucho más reducidos, están en agua clorada y no es agua salada como en los delfinarios que están cerca del mar, como si sucede en Baja California y Quintana Roo”, señalo el asambleísta.
En caso de que la prohibición no sea respetada, la ley contempla que se impongan multas desde 1,500 hasta 4,000 unidades de medida y de actualización, lo que sumaría desde 113,000 pesos y hasta 300,960 pesos.
López Adame recordó que una iniciativa similar a nivel federal ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y el dictamen está atorado en la Cámara de Senadores, por lo que espera que la aprobación de la reforma en la Ciudad de México sirva como impulso.
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