Así cambió la prisión a los exgobernadores acusados de corrupción
En su extradición a México, Roberto Borge se veía desmejorado y con muchos kilos menos en comparación con sus años en el poder como gobernador de Quintana Roo. Pero no es el único. Otros exgobernadores que han sido detenidos también han visto su aspecto desmejorado luego de tener que enfrentar a la justicia.
Roberto Borge. Gobernador de Quintana Roo entre 2011 y 2016. Fue detenido en Panamá en junio de 2017, a raíz de acusaciones de autoridades federales y locales en el sentido de que desvió recursos públicos, mediante esquemas como la venta de terrenos estatales a precio de ganga a personas de su círculo.
Javier Duarte. Gobernador de Veracruz entre 2010 y 2016. Fue detenido en Guatemala en abril de 2017 después de permanecer prófugo durante seis meses. Al igual que a Borge, autoridades federales y locales lo acusan de desviar recursos del erario. En su caso, se le atribuye haber sido la cabeza de una red de empresas fantasma que recibían dinero público para redirigirlo a sus allegados.
Eugenio Hernández. Gobernador de Tamaulipas entre 2005 y 2010. Fue detenido en Ciudad Victoria en octubre de 2017. Autoridades de Estados Unidos, país que lo solicitó en extradición, lo acusan de fraude y asociación delictuosa para lavar dinero.
Tomás Yarrington. Gobernador de Tamaulipas entre 1999 y 2005. Fue detenido en abril de 2017 en Florencia, Italia, donde se encuentra desde entonces. El exmandatario es acusado de crimen organizado y lavado de dinero, así como señalado de nexos con grupos del narcotráfico que operaban en Tamaulipas y enviaban droga a Estados Unidos. Tanto el gobierno de México como el de EU han solicitado su extradición.
Guillermo Padrés. Gobernador de Sonora entre 2009 y 2015. Se entregó a las autoridades en noviembre de 2016 y desde entonces está detenido. A nivel federal, el panista enfrenta acusaciones por los delitos de enriquecimiento ilícito y desvío de recursos.