Nota del editor: Francisco Ceballos es director general de Despegar.com. Las opiniones expresadas en esta opinión son exclusivas del autor.
(Expansión) – Es curioso que la venta de artículos navideños comience a finales de septiembre, pues aunque pareciera algo absurdo, muchas personas lo consideran una buena oportunidad para comprar los adornos de sus casas. Pero, ¿por qué comprar con tanto tiempo de anticipación? En realidad tiene que ver con las ventajas que ofrece.
Entre más lejos esté la Navidad, pocas personas buscarán comprar productos navideños, por lo que habrá una gran variedad de artículos a excelentes precios. Mientras más se acerque la Navidad, más personas desearán comprar artículos para esta fiesta, por lo que comenzarán a agotarse y su precio aumentará. Esto mismo sucede cuando buscamos reservar de último momento una noche de hotel o comprar un boleto de avión.
La mayoría de las veces que planeamos viajar nos enfocamos en elegir el destino y las actividades que vamos a realizar, dejando a un lado factores importantes, como la compra de los servicios turísticos que vamos a necesitar.
Muchas personas se esperan a que la fecha de su viaje esté cerca para revisar los costos del avión, las noches de hotel y hasta las actividades o atracciones, y se llevan, por supuesto, una gran desilusión, ya que al viajar con tan poca anticipación, los precios aumentan y el gasto es mayor.
Por esta razón es importante anticipar la compra de cualquier tipo de viaje, pues solo así encontraremos los mejores precios y evitaremos que algún servicio, por ejemplo una noche de hotel, ya no esté disponible.
nullAhora bien, si piensas viajar en diciembre debes considerar que se trata de un mes con una alta demanda turística y por ende la temporada más cara para viajar; los precios de hoteles, vuelos y paquetes tienden a subir hasta un 30%, en comparación con cualquier otro mes. Sin embargo, la clave para poder realizar un viaje en Navidad o Año Nuevo, así como en cualquier otra fecha, está en la compra anticipada del viaje.
Las aerolíneas (nacionales e internacionales), por ejemplo, cuentan con diferentes tarifas para un mismo vuelo, es decir, una persona que viaja a Miami puede pagar 300 dólares por la ida y el regreso, mientras que otra persona puede llegar a pagar hasta 1,400 dólares y viajar en el mismo vuelo que la persona que pagó 300 dólares.
Esto se debe básicamente a la ley de la oferta y la demanda: entre más se acerque la fecha de salida del vuelo hay una mayor probabilidad de que el avión comience a llenarse, y por este motivo aumenta el precio de viajar en ese vuelo.
Este comportamiento es muy común verlo en diciembre, donde el precio de los boletos de avión es cada vez más alto conforme se acerca la Navidad, lo que también pasa con los hoteles. A medida que se va acercando la fecha del viaje se van agotando las opciones más económicas y cada vez es menos probable que encontremos una habitación a un buen precio, e incluso, que haya alguna disponible para la fecha deseada.
Lamentablemente, muchos dejan para mañana lo que pueden hacer hoy y esto afecta a nuestro bolsillo, cuando de viajar se trata.
De acuerdo con un estudio realizado por la agencia de viajes más grande de Latinoamerica, la mayoría de los mexicanos compra sus viajes con muy poca antelación, de 15 a 30 días antes de la fecha de salida. En contraste, los europeos compran con mayor tiempo (2 meses) y logran excelentes ahorros, que se traducen en muchos más viajes a un bajo presupuesto.
¡Viajar es posible!, la verdadera clave está en la anticipación.