OPINIÓN: EL CDO, el responsable de la transformación digital de una organización

Nota del editor: Olivia Salas tiene la licenciatura en Mercadotecnia y una maestría en Administración de Negocios, ambas en la Universidad del Valle de México. Cuenta con más de 20 años de experiencia en la industria de TI. Actualmente es Regional Marketing Manager en Red Hat México, empresa a la que se integró en 2013. Las opiniones expresadas en esta columna son responsabilidad del autor.

(Expansión) – En los ambientes de negocio es cada vez más frecuente encontrar a ejecutivos que desempeñan el cargo de Chief Digital Officer (Director de Digitalización; CDO, por sus siglas en inglés). De hecho, se estima que en todo el planeta, y abarcando prácticamente cualquier industria, hay más de 2,000 CDO trabajando en la actualidad –hace 8 años, su número se calculaba en apenas 27 .

El CDO es el encargado de encabezar la transformación digital de una organización, es quien reconoce el potencial de las innovaciones de hoy (como Big Data, Internet de las Cosas, software de código abierto , analítica, movilidad, nube, entre otras) y mantiene la tecnología alineada a las metas empresariales.

Cuando su visión tiene éxito, la empresa obtiene beneficios de negocio de la digitalización, como mayores niveles de productividad y rentabilidad, altos índices de satisfacción del cliente y nuevas oportunidades de negocio en mercados diferentes o a través de nuevos canales.

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En México, y en general en Latinoamérica, el CDO es una posición ejecutiva que aún tiene poca visibilidad . Motivados por los proyectos de transformación digital que realizan sus empresas, muchos directores de Sistemas (CIO, por sus siglas en inglés), dado su conocimiento técnico, están evolucionando al rol de CDO.

Asimismo, líderes de otras áreas que aspiran al cargo están aprendiendo todo lo que pueden sobre herramientas innovadoras.

Sin embargo, aunque el expertise técnico siempre será una ventaja, lo que define a un CDO no es el dominio de los temas de hardware y software, sino la capacidad de concebir, implementar y conducir un proceso que modificará aspectos esenciales de una organización. Y lo más relevante, que dicha evolución repercuta en resultados de negocio positivos.

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Algunas características del rol de CDO que contribuyen a su éxito:

· Una perspectiva empresarial de la innovación. Al momento de considerar soluciones como IoT, Machine Learning (ML) o una plataforma para crear aplicaciones móviles, más que detenerse en los detalles técnicos, el CDO proyecta el valor que aporta al negocio el uso de las tecnologías.

Por ejemplo, la forma en que IoT mejoraría las tareas logísticas, el efecto de ML en la detección de transacciones fraudulentas, o las unidades de negocio que incrementarán su rendimiento con una aplicación móvil especializada. Los parámetros de éxito del CDO no están basados en bytes sino en indicadores de negocio para toma de decisiones.

· Ser un embajador de la transformación digital. El CDO divulga -y demuestra- los beneficios de la innovación entre todas las unidades de negocios. Para lograrlo, construye relaciones fuertes con los líderes corporativos, define iniciativas en las que colaboran distintos departamentos y valida a nivel empresarial el impacto de la evolución digital.

Por ejemplo, muestra cómo una aplicación móvil respaldada por capacidades analíticas puede materializarse en un conocimiento mayor del consumidor para presentar ofertas más exitosas, incrementar índices de lealtad y generar nuevas oportunidades de venta.

· Ser un administrador del cambio. Como cualquier otro proceso que implica una ruptura de paradigma, la transformación digital puede causar inquietudes y resistencia en toda la organización. De ahí que el CDO debe ser receptivo y empático con las situaciones que se presenten, y desarrollar estrategias que aclaren y justifiquen la necesidad de asumir una nueva dirección.

En este camino del cambio, se deberán abordar varios temas fundamentales: las nuevas dinámicas de mercado y de interacción con el consumidor, la necesidad de ser más ágiles para reaccionar al entorno, cómo optimizar costos mientras se mejora el servicio, el auge de ofertas y campañas personalizadas, y muchos más. En ese sentido, el CDO debe vigilar que la evolución digital de la compañía vaya acompañada de un cambio cultural.

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Así, las competencias esenciales del CDO, que se fortalecen con una perspectiva informada de las tecnologías más innovadoras del momento, apuntan a conceptos como liderazgo, capacidad para compartir una visión, y facilidad para construir consensos y fomentar el trabajo colaborativo.

En un proyecto de transformación digital, el concepto de “transformación” involucra un desafío enorme. Quien aspire a liderar la iniciativa -es decir, quien quiera asumir el rol de CDO- deberá considerarlo y poner su visión y liderazgo en práctica.

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