OPINIÓN: La Cuarta Revolución y los retos del Mercado Laboral 4.0

Nota del editor: Sergio Porragas es director de Operaciones de OCCMundial. Licenciado en Administración de Empresas con especialidad en Finanzas por la Universidad Nuevo Mundo, ocupó por más de 12 años puestos internacionales dentro del área de finanzas en Procter & Gamble y también colaboró en Convermex. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas de su autor.

(Expansión) — Últimamente, la frase “la realidad supera la ficción” parece cobrar más significado que nunca. En la actualidad, hablar del Internet de las Cosas (IoT), la cirugía robótica, la Inteligencia Artificial, la impresión 3D, el Big Data, las fábricas inteligentes y otros temas de esta naturaleza, ya no resultan propios de la ciencia ficción, sino son parte de la llamada Cuarta Revolución Industrial.

Aunque los expertos no terminan en ponerse de acuerdo acerca del inicio de esta etapa, lo cierto es que muchos de estos cambios ya están en marcha. No es casualidad que prepararse para la Cuarta Revolución Industrial fue uno de los cuatro desafíos en los que se centró la última reunión del Foro Económico Mundial de Davos a principios de 2017. Y es que la también llamada Revolución 4.0 implica un gran salto impulsado por la era digital, que está transformando nuestra forma de vivir y de entender el mercado del trabajo, de ahí que el mercado laboral 4.0 sea un término que, poco a poco, vayamos escuchando con mayor frecuencia.

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Y tú y tu empresa ¿saben a qué tipo de desafíos se tendrán que enfrentar en un futuro no muy lejano? En los últimos meses, numerosos informes de organismos y entidades privadas han intentado dibujar cómo será un mercado laboral en un mundo en donde la tecnología será la protagonista. Aquí te damos algunos ejemplos:

1. Según el World Economic Forum, saber solucionar problemas complejos, el pensamiento crítico, la creatividad, la gestión de equipos y personas o la inteligencia emocional, serán algunas de las principales competencias profesionales para el año 2020.

2. En concordancia con lo anterior, un trabajo de investigación de la BBC, afirma que a pesar de que se estima que 5 millones de ocupaciones tradicionales serán reemplazadas por robots e Inteligencia Artificial en los próximos años, la Revolución 4.0 impulsará el surgimiento de nuevas plazas que ponderen la creatividad y el liderazgo por encima de la alta tecnología.

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3. Thomas Frey, director ejecutivo del DaVinci Institute y uno de los futurólogos preferidos de Google, apunta que para 2030 sectores como el Internet de las Cosas (IoT), el Big Data y la impresión 3D tendrán un gran crecimiento con la llegada de la tecnología al mercado laboral. En su opinión, se crearán nuevas industrias, sectores y técnicas, además de que serán necesarios especialistas que ayuden a entender cada nueva tecnología y la forma de aplicarla.

4. De cara al futuro se requerirán cada vez más expertos capaces de desarrollar sistemas seguros de protección y medidas antiataques que sean escalables y efectivas. Sin duda, en un mundo donde hay cada vez más máquinas y dispositivos conectados a la red, el riesgo de un potencial ciberataque es también mayor, ejemplo de ello lo fue el ciberataque masivo que afectó, en mayo pasado , a miles de empresas e instituciones de al menos 99 países alrededor del mundo.

5. Benedikt Frey y Michael Osborne, catedráticos de la Universidad de Oxford, realizaron un estudio en el que afirman que los trabajos de telemarketing serán reemplazados por robots casi en su totalidad en unos 20 años. En el caso de los vendedores, la tasa de reemplazo será de un 92% y en los pilotos de un 50%.

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6. Por último, Randstad Research prevé que la digitalización demandará cada vez más perfiles de desarrollo de aplicaciones, soluciones de movilidad y arquitectos cloud, muy vinculados a la digitalización.

Fantasear con avances tecnológicos donde las máquinas sustituyan gran parte de las tareas del hombre y los medios digitales eliminen fronteras en un mundo globalizado ya no es asunto de la literatura y el cine. Sin lugar a dudas, las nuevas tecnologías configurarán un mercado laboral 4.0, en el que se crearán nuevas necesidades y exigirá apuntalar nuestras fortalezas. Afortunadamente ser imaginativo, tener la capacidad para tomar decisiones y dirigir equipos, son competencias propias del ser humano que aún no puede hacer un robot.

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