OPINIÓN: El nuevo perfil del talento de tecnología al servicio de la creatividad

Nota del editor: Juan Soprano es Executive Technology Director R/GA Latam. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas del autor.

(Expansión) – Cuando uno piensa en talento de tecnología, el pre concepto puede llevarnos a suponer que se trata de profesionales con un pensamiento más duro y técnico, ligado a la matemática, a la lógica y a la Ingeniería.

Por el ADN que lleva dentro el sector de digital y de publicidad se apunta al desarrollo de proyectos y experiencias de excelencia donde la creatividad se cruza con el diseño y la tecnología, por lo que el perfil del nuevo profesional cambió y ahora se busca un perfil con características particulares.

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Es muy importante poder ofrecer calidad de diseño, creatividad y una solución tecnológica que logre llevar esa creatividad a la realidad, valiéndose de la tecnología como herramienta. Esto se da a partir de que muchas veces los diseñadores realizan proyectos de gran calidad pero que no tienen anclaje en lo tecnológico y no se pueden llevar a la práctica.

Para tal fin, el tipo de perfil de desarrollador/a que se necesita, en particular, dentro de esta industria, es la clase de profesional tech al que realmente le gusta lo que hace y está dispuesto a poner todo de sí mismo para poder lograr hacer realidad esos diseños. Son perfiles que se sienten cómodos en la interacción con otras áreas.

Es un hecho que para los desarrolladores, nunca es fácil interactuar con el área de diseño/creatividad. A veces, los diseños son de gran calidad pero muy complejos para llevar a lo concreto, por eso se tiene que dar una comunión entre desarrolladores y las áreas creativas donde la sobresaliente del diseño se complementa con el grupo de profesionales tecnológicos.

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Por lo general, en el mercado tecnológico es inusual tener la oportunidad de trabajar en entornos de este tipo, ya que muchas veces el rol de los desarrolladores implica abocarse siempre a un mismo proyecto y trabajar siempre para el mismo cliente, por ende, después de unos años o incluso menos, la tarea puede resultar monótona y poco desafiante.

Una de las particularidades de estos nuevos desarrolladores es que se trata de profesionales inquietos, a los que les gusta trabajar en proyectos que saben que serán realmente “marcadores de tendencias” tanto en el mundo de la tecnología como del diseño. En muchas agencias un desarrollador puede, en el mismo día, estar trabajando en proyectos para empresas que marcan el rumbo a nivel mundial.

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Es usual terminar un proyecto y al día siguiente verlo online y también que se vea reflejado en todos los medios a nivel mundial. Formar parte de una red global hacer que tu trabajo tenga visibilidad y que se sume al reconocimiento de los pares y de otras agencias. Aunque esto no es tan común en la industria de la tecnología, existen agencias donde esto es moneda corriente.

En definitiva, el reto es contar con talento de tecnología acorde con el desafío, se trata de nuevos perfiles que si bien pueden ser expertos en una o más tecnologías, no tienen miedo a sentarse y querer aprender y desarrollar otras. De esta manera, están actualizados con lo último en la industria y, con este conocimiento, pueden tomar decisiones versátiles sobre qué tecnología usar para cada proyecto, con la suficiente experiencia y testeo.

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