Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Bono generacional en México: clave para el crecimiento

Las empresas deben realizar inversiones estratégicas con visión de corto, mediano y largo plazo en el desarrollo de sus empleados, opina Mauricio Hubard.
sáb 07 marzo 2020 07:01 AM
Bono generacional - bono demográfico - jóvenes - mexicanos - jóvenes mexicanos
En la búsqueda del desarrollo de los empleados, el esfuerzo debe ser tanto de la iniciativa privada como del gobierno, del sistema escolar público y privado, opina Mauricio Hubard.

(Expansión) – “La gente joven necesita modelos, no críticos”: John Wooden.

El pasado 12 de febrero, el World Economic Forum (WEF) publicó un estudio muy interesante que tituló “These countries are aging the fastest - here’s what it will mean” en el que plantea el tema de la edad promedio de la población económicamente activa en diferentes países del mundo; en algunos representa un gran problema y en otros una oportunidad.

Básicamente se mide cuántas personas en capacidad de trabajar existirán en un país con relación a las personas que ya no trabajan, es decir, cuánta gente aporta a la economía de una nación y cuánta no, el potencial productivo que aporta al PIB de un país.

Publicidad

Esto representa un problema para economías como la de Japón, donde para el año 2050 habrán 82 adultos que no trabajan por cada 100 trabajadores (82/100), el impacto en la economía se verá traducido en una baja importante en la productividad nacional y una recomposición en el destino de los recursos del gobierno de forma drástica. Por ejemplo, de cada yen con el que cuente el gobierno en su presupuesto anual, una mayor proporción se destinará a atender las necesidades de salud de los adultos mayores, lo que deja menos recursos para inversión.

En cambio, en México los datos son opuestos, la población en capacidad de trabajar se incrementará en un 20%, por cada 100 personas trabajando habrán sólo 40 (40/100) en edad de retiro.

Son pocos los países de la OCDE que tendrán esta situación favorable. En general, para el 2060 la mayoría tendrá una relación superior a 65 personas en retiro contra 100 (65/100) trabajando.

Y esto es de gran importancia para México, es una ventaja competitiva fundamental en la toma de decisiones con relación a dónde invertir de las empresas (nacionales y extranjeras) que buscarán tanto la oferta de gente para trabajar, como el flujo que generará en la economía y un mercado de consumidores -los jóvenes consumen mientras los adultos mayores ahorran para el retiro-.

Pero es muy importante el aprovechar esta oportunidad, desarrollar una clase social predominantemente media que tenga preparación para ocupar los puestos de trabajo del futuro; por ejemplo, en cuestiones tecnológicas, que cuente con los medios para ser un consumidor importante de los productos y los servicios de las empresas.

Algo muy importante: incentivar a los jóvenes a emprender, arriesgarse a crear empresas, a innovar, a generar empleos; para esto, debemos acompañarlos con los elementos que les permitan lograr lo anterior, que cuenten con acceso al mercado de capital de riesgo (que debe crecer significativamente), dar facilidades en trámites legales, capacitación, etcétera. Los jóvenes necesitan asumir su liderazgo, su capacidad creativa, su capacidad de transformación en el sistema económico.

Publicidad

También las empresas deben realizar inversiones estratégicas con visión de corto, mediano y largo plazo en el desarrollo de sus empleados, acompañados por programas de retención del talento, que fomenten la participación de todos en las empresas.

En este sentido, el esfuerzo debe ser tanto de la iniciativa privada como del gobierno, del sistema escolar público y privado.

Organismos como el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) pueden jugar un papel relevante, deben de replantear sus programas a fin de preparar a los jóvenes para ocupar los puestos de trabajo que el desarrollo económico demande y demandará en el tiempo.

México tiene todo para ser una potencia económica, a la fecha cuenta con 13 tratados de libre comercio que incluyen a más de 65 países y las principales regiones económicas del mundo, principalmente el T-MEC.

Nuestra posición geográfica es estratégica, una economía de mercado, inversión extranjera importante (falta actualmente la privada y pública), etcétera, pero la variable más importante es el potencial del capital humano, el talento del mexicano y el bono demográfico que el estudio del WEF nos muestra.

Vale la pena decir que el bono demográfico en nuestro país se ha presentado desde hace ya varios años, el número de jóvenes que se sumaron a la población económica activa (PEA) se incrementó en 9 millones en la última década, sin embargo, no tuvimos la capacidad de generar el crecimiento adecuado en la economía que les permita encontrar un trabajo; más del 35% se sumó a la informalidad, esto debe de cambiar, debemos hacer lo necesario para convertir este bono en una de nuestras mayores ventajas estratégicas.

Publicidad

Necesitamos una economía en constante crecimiento y en niveles superiores al promedio del 2% anual de los últimos años (quitando el 2019, por supuesto), políticas de gobierno que promuevan el desarrollo de las zonas más pobres y compromisos de las empresas para invertir en estas zonas. Mientras la zona del Bajío ha crecido en niveles superiores a la media nacional, en Chiapas o Tabasco el crecimiento ha sido negativo.

Tenemos todo para lograr un mejor futuro, para atraer inversiones, desarrollar el capital humano; se requiere de un gran trabajo en conjunto de todos, debemos enfocarnos como país en lograrlo, en especial el enfoque en la juventud es fundamental.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad