El Senado da carpetazo a la polémica por la destitución de Santiago Nieto
Ante la imposibilidad de ponerse de acuerdo sobre si objetarían o no la destitución de Santiago Nieto como fiscal electoral, los senadores decidieron dar carpetazo al asunto, desistieron de discutirlo y, en lugar de ello, anunciaron que iniciarán el camino para elegir a quien será el nuevo titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).
La Junta de Coordinación Política (Jucopo) informó este martes que las bancadas del PRI, del PAN, del PRD y del PVEM acordaron que la próxima semana el Senado emita la convocatoria para seleccionar al nuevo funcionario.
El acuerdo se produjo a tres días de que el viernes próximo termine el plazo para que los senadores se pronuncien sobre la destitución de Nieto.
Sin embargo, los senadores se fueron de 'puente' por el Día de Muertos y citaron a sesión hasta el martes 7 de noviembre, con lo que se cierra la puerta a que la destitución de Nieto sea discutida.
“Estuvimos buscando la forma de destrabar esto, yo estaba en la disposición”, señaló el líder del PRI, Emilio Gamboa, y detalló que, ante los desacuerdos, él y los coordinadores del PAN, del PRD y del PVEM decidieron pasar a otra etapa.
“Tomamos la decisión, entre los cuatro, de que lo que más convenía para darle fluidez a lo que viene, que es el nombramiento del fiscal en material electoral, es que saquemos ya la convocatoria”, dijo Gamboa a los medios.
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Nieto fue removido de la Fepade por el subprocurador Alberto Elías Beltrán , quien argumentó que el ahora exfiscal violó el Código de Conducta de la Procuraduría General de la República (PGR) al hablar públicamente de los casos que lleva la Fepade, como la investigación por los sobornos que la constructora brasileña Odebrecht presuntamente dio a altos funcionarios mexicanos. Nieto dio una entrevista al diario Reforma, en la que habló sobre el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya.
En un principio el exfuncionario negó haber violado las normas de la PGR y buscó objetar su despido, aunque finalmente hace unos días desistió de tratar de regresar al cargo porque consideró que, incluso si era restituido, ya no estaría en condiciones de ejercer su labor.
Dentro del Senado, las bancadas del PRI y del PVEM respaldaron la remoción, mientras que el PAN, el PRD y el bloque PT-Morena rechazaron la medida y exigieron que el pleno se pronunciara sobre si la objetaría o no.
Esto abrió un debate sobre la forma de votar el asunto, en el que priistas y pevemistas planteaban que el voto fuera secreto y la oposición demandaba que el sufragio se realizara en el tablero público. Al final, luego de que ninguna de las partes cediera en su postura, los legisladores optaron por cerrar el caso.
