La violencia, a la sombra de las elecciones en los estados que cambian gobierno

Las nueve entidades que renuevan Poder Ejecutivo en julio encaran el reto de ‘blindarse’ frente a un eventual deterioro de su situación de inseguridad.
Riesgos Las autoridades deben garantizar que los comicios se desarrollen en un ambiente de paz. (Foto: nito100/Getty Images/iStockphoto)

Los nueve estados que renovarán gobierno en las elecciones del 1 de julio se enfrentarán al reto de cuidar su situación de seguridad, tanto de cara a la contienda como el día de las votaciones y en sus respectivos periodos de transición.

Este año, los electores de Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán acudirán a las urnas para votar —además de por presidente de la República y legisladores federales— por un nuevo gobierno estatal, entre cuyos principales desafíos estará atender los crecientes niveles de violencia, que el año que terminó perfilaron un nuevo récord a nivel nacional.

En seis de esas nueve entidades se han registrado alzas en el índice de víctimas de homicidios dolosos —

—, de acuerdo con los datos oficiales más recientes. Por ejemplo, en Puebla el incremento fue de 165% entre noviembre de 2016 y el mismo mes del año pasado; el mes con más asesinatos en la entidad fue julio pasado, con 119.

Otros estados con altos niveles de población que presentan problemas de inseguridad son Jalisco, donde los homicidios dolosos crecieron 44.6% en un año, y Veracruz y la

, que tuvieron un alza de 16%.

En contraste, los tres estados que presentaron una disminución en el indicador de víctimas de homicidios dolosos fueron Yucatán (66.6%), Morelos (30.7%) y Chiapas (15.2%), en tanto que Tabasco presentó un incremento de menos de 3%.

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En alerta

Estas entidades —salvo Yucatán y Chiapas— están inmersas en una “abierta crisis de violencia”, de acuerdo con el director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas, quien señaló que en ellas se presentó en 2017 un crecimiento de la incidencia delictiva, en tanto que las expectativas para el año que inicia

.

“Ante esta contienda electoral, se espera que las tendencias en 2018 se mantengan o incluso se agudicen. 2017 probablemente terminará con la tasa de homicidios más alta de los últimos 21 años, en un contexto donde prácticamente todos los delitos crecen. Pese a esta grave crisis, debemos estar atentos en demandar acciones y resultados a nuestras autoridades porque nada augura que en 2018 se reduzca la violencia”, apuntó Rivas en un artículo recientemente escrito para

.

La organización ha advertido,

, que los cambios de gobierno pueden generar espacios de riesgo en los niveles de inseguridad, en parte por los reacomodos de autoridades, y porque parte del trabajo de las instituciones se ‘congela’ y da oportunidad a la delincuencia y la impunidad.

La inseguridad también ha prendido las alarmas de las autoridades responsables de las votaciones, pues el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) incluyeron a Guerrero, Michoacán, Tamaulipas, Veracruz y Chihuahua en un diagnóstico de zonas de riesgo para los próximos comicios federales, citado recientemente por el diario

.

El problema de la violencia en el país suele ubicarse en las encuestas entre los que más preocupación generan entre los ciudadanos, junto con otros como la corrupción y la falta de crecimiento económico.