Publicidad
Publicidad

La tecnología impulsó el primer disturbio británico del siglo 21

Los disturbios en esta zona londinense fueron organizados por adolescentes miembros de pandillas que usan tecnología móvil
lun 08 agosto 2011 05:55 PM
bomberos apagan un incendio en londres
londres-disturbios bomberos apagan un incendio en londres

La tecnología móvil demostró ser un medio para impulsar y registrar los disturbios del fin de semana en el barrio de Tottenham, en Londres .

La cobertura de los sucesos fue dominada por Twitter, medio a través del cual los jóvenes alborotadores publicaron comprometedoras imágenes de ellos mismos robando en las tiendas saqueadas durante las revueltas, señaló The Telegraph .

Los adolescentes también utilizaron teléfonos inteligentes BlackBerry para transmitir mensajes y organizarse durante el caos, señaló el portal. Este smartphone, antes casi exclusivo de los altos ejecutivos, es ahora una herramienta cada vez más popular entre miembros de pandillas urbanas.

Su servicio gratuito de mensajería instantánea BlackBerry Messenger permite una comunicación privada, ya que se produce a través del intercambio de un PIN (número de identificación personal) y está encriptado, a diferencia de los mensajes a través de Twitter y Facebook, que requieren de un servicio de internet, explica The Telegraph.

Esta encriptación es la razón por la cual Reasearch in Motion, fabricante de Blackberry, ha sido blanco de algunos gobiernos, como el de Arabia Saudí, ya que no pueden interceptar los mensajes de estos smartphones . La codificación de mensajes responde a la intención de mantener una mejor seguridad para la gente que hace negocios.

Mark Duggan, cuya muerte en medio de un tiroteo policiaco provocó los disturbios , utilizó el Blackberry Messenger para enviar su último mensaje a su novia, Semone Wilson, de 29 años de edad: “Los federales me siguen”.

Publicidad

El popular smartphone también fue utilizado para difundir los rumores acerca de la muerte de Duggan, y acerca de si él había disparado contra la policía primero, indicó el portal.

Al comenzar los disturbios, tras una marcha de protesta por la muerte de Duggan , la noticia del alboroto se extendió rápidamente a través de las redes sociales, antes de que el canal de noticias BBC iniciara su cobertura, señaló The Telegraph.

Las noticias y las fotos de coches incendiados publicadas a través de Twitter atrajeron a muchos participantes desde todas las partes de Londres.

Blogueros y tuiteros anunciaron en redes sociales que se dirigían al barrio de Tottenham para participar en los disturbios. Una vez en la zona, realizaban reportes acerca de cómo los manifestantes formaban barricadas o arrojaban piedras contra helicópteros de la policía.

Manifestantes y espectadores captaron y subieron videos del tumulto a YouTube utilizando cámaras portátiles y teléfonos celulares, indicó The Telegraph. Algunos de ellos mostraban imágenes de la policía anti-disturbios arremetiendo contra las barricadas, y otros registraban incendios en establecimientos comerciales.

Muchos participantes en las revueltas tomaron y subieron fotos a las redes sociales mientras participaban en el saqueo de las tiendas, mostrando los artículos robados a manera de trofeo, señaló The Telegraph.

"Los medios sociales y otros métodos han sido empleados para organizar estos niveles de avaricia y criminalidad", dijo el subinspector Steve Kavanagh.

En un momento, los equipos de los servicios de noticias de Sky News y BBC tuvieron que retirar sus camionetas satelitales de la zona de los disturbios, después de que miembros de la BBC fueran atacados mientras realizaban un reporte en vivo. Durante su ausencia, muchos espectadores ansiosos de información recurrieron al flujo de noticias constante que ofrecía Twitter.

Durante y después de los disturbios, el servicio de microblog estuvo lleno de mensajes cargados de argot callejero, que describían los incidentes ocurridos este fin de semana en Tottenham, señaló The Telegraph.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad