STEAM, no STEM: por qué la innovación necesita del arte
Quienes saben de la importancia de la innovación, tanto a nivel empresarial como gubernamental, están familiarizados con las iniciales STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemática, por sus siglas en inglés). Las cuatro disciplinas son consideradas como básicas para la empleabilidad en un mundo híper tecnológico.
Sin embargo, para el evangelista en innovación Alberto Levy, a estas iniciales les falta una muy importante: la A, de arte.
“Para innovar, la creatividad es una cuestión vital y es algo muchas veces ausente en las carreras de las llamadas ciencias duras“, dice Levy en entrevista con Expansión. “Las artes son una parte fundamental del desarrollo innovativo, y aún más del disruptor“.
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Levy, que estudió arte en la Universidad de Nueva York -previamente desarrollándose como programador- antes de dedicarse a crear soluciones tecnológicas para empresas y gobiernos, trabaja actualmente en un proyecto para crear imágenes a través de las ondas cerebrales generadas por diferentes estímulos.
“No es que STEM no sea importante, es la base de todo. Pero el estudio del arte permite ver más allá de lo evidente. Un grave problema que tienen las compañías actualmente es que hacen innovación por innovar, presentan nuevas habilidades en sus objetos que en realidad no sirven de nada, o de muy poco, porque están concentradas en agregar tecnología, no en darle un uso realmente útil”, asegura
Personajes innovadores del mundo tecnológico tuvieron sus inicios en carreras creativas: Larry Page, cofundador de Google , estudió arquitectura antes de introducirse en la ingeniería; y Brian Chesky y Joe Gebbia, cofundadores de Airbnb, estudiaron diseño.
El tecnólogo y artista brasileño, considera que tendencias como inteligencia artificial, son en ocasiones abusadas sin mayor propósito, mientras que son pocas las empresas que están utilizando la tecnología en formas que de verdad cambien la vida de las personas.
“El problema es que actualmente pensamos en innovar para hacer la vida más fácil, no para hacer la vida mejor. Eso requiere más esfuerzo, y mayor creatividad“, sostiene.
