Los teléfonos móviles ayudan a mejorar la respuesta ante catástrofes
Terremotos, huracanes y otros desastres han puesto a prueba a los teléfonos móviles al transformar la manera en la que los rescatistas responden ante las crisis humanitarias y permiten identificar exactamente los lugares más afectados para canalizar la ayuda.
Una de las formas más sencillas para donar a afectados es a través de transferencias por medio de aplicaciones, de acuerdo con socorristas y especialistas en tecnología reunidos durante el Mobile World Congress en Barcelona.
"Las compañías de telecomunicaciones pueden detectar los lugares donde se concentran los afectados por un desastre rastreando la ubicación de sus teléfonos móviles. (...) Las operadoras pueden ayudar a los gobiernos y a las organizaciones no gubernamentales en la planificación y toma de decisiones", dijo Mats Granryd, director general de GSMA, la asociación mundial de operadores móviles que organiza el congreso.
Incluso la ONU tiene el Programa Mundial de Alimentos que trabaja con operadoras para "saber a dónde va la gente" que huye de un área de desastre o conflicto.
La agencias de ayuda humanitaria recurren también a las miles de fotos y mensajes que la gente intercambia en redes sociales para conocer las condiciones sobre el terreno.
Programas informáticos permiten recopilar tuits u otras informaciones que provengan de zonas de crisis y en base a eso elaborar mapas de zonas inundadas o identificar los insumos que se necesitan luego de un huracán.
La estadounidense agencia federal de emergencias (FEMA) lanzó una aplicación que permite a los usuarios tomar fotos que son automáticamente geolocalizadas, permitiendo así identificar las zonas más afectadas.
Asimismo, la FEMA contrata personas, llamadas "oyentes sociales", que se dedican a buscar mensajes en Facebook, Snapchat u otras redes sociales para compilar información útil para los socorristas.
