Una de las experiencias que se pierden a la hora de rentar un departamento o casa en aplicaciones como Airbnb o Booking es la de tener un concierge que te ayude en caso de necesitar algún servicio extra. Ante esta necesidad la startup con sede en San Francisco, Sonder, busca que las experiencias se apoyen de un servicio de concierge.
Sonder quiere ser el concierge de Airbnb, no su competencia
“Aplicaciones como Airbnb o Booking revolucionaron la forma de viajar, sobre todo por la adaptación y flexibilidad que proporcionan, pero conforme va creciendo esta forma de hospedaje va creciendo la necesidad de operar mejor este tipo de espacios, sobre todo para mejorar la experiencia de los usuarios, las reglas que hay, las preferencias de los usuarios, etc”, precisó Roberto Fernández, gerente regional de Sonder para México y Latinoamérica.
La empresa da servicios desde desde su aplicación a los usuarios, ya sea que necesiten toallas o requieran recomendaciones para ir a cenar sin la necesidad de que esté un concierge en un Lobby. Sonder tiene 11,000 espacios en alquiler en más de 35 ciudades. Y recientemente anunció una ronda de financiación de 200 millones de dólares, por lo que su valoración llegó a los 1,300 millones de dólares, de acuerdo a GeekWire.
“Arrancamos con 16 unidades que están ubicadas en la Colonia Condesa, todos son de dos habitaciones y la intención es empezar a probar el mercado. Las agencias online para nosotros son puntos de venta, pero con este extra de experiencia entre las opciones que Airbnb o Booking pueden ofrecer”, precisó Fernández.
En un momento en que la pandemia de COVID-19 ha afectado gravemente a la industria de viajes, Sonder promueve numerosas funciones sin contacto, que incluyen conserjería digital, registros de entrada y salida a través de teléfonos inteligentes y no hay vestíbulos.
“La coyuntura ha provocado que los viajeros busquen tener la certeza de que el espacio a dónde llegan está limpio y sanitizado, y donde la atención puede ser sin tener un contacto de persona física, al final nos apoyamos de la tecnología para resolver los problemas de los usuarios. Dentro de nuestra experiencia en otros espacios vemos que usuarios locales buscan rentar este tipo de espacios no para viajar, sino para salir a trabajar a un espacio que no sea oficina, pero donde puedan trabajar y donde se garantice que esté sanitizado”, dijo Fernández.
A diferencia de un Starbucks o de una oficina, los usuarios en otras partes del mundo están buscando salir de casa pero para ir a otro sitio a trabajar o despejarse de sus propias casas.
“La longitud de las estancias también se han vuelto más largas, antes el promedio era de cuatro noches por estancia, pero ahora muchos se quedan más tiempo y trabajan de forma remota en el lugar donde alquilan, pero para este tipo de esquemas hay necesidades puntuales en cuanto a los espacios, por lo que hemos empezado a tener paquetes atractivos para los usuarios que buscan este tipo de estancias”, dijo Fernández.
De acuerdo a un estudio de Airbnb, el 84% de las búsquedas realizadas por mexicanos en esa plataforma son para destinos domésticos y para realizarse entre agosto y septiembre, sin embargo en paralelo, la empresa de hospedaje ha tenido distintos retos económicos en los últimos meses, pues la empresa tuvo que recortar al 25% de su personal global.