El estado de California en Estados Unidos votó por el modelo de contratación que tendrán aplicaciones de transporte y delivery, y definió que los conductores y socios de aplicaciones serán clasificados como contratistas independientes, el lugar de empleados, lo que dejará a miles de asociados con el modelo con el que han trabajado en los últimos años.
El estado de California en EU definió el modelo de contratación de Uber y Lyft
California votó para definir cuál sería el modelo de contratación de los socios conductores y trabajadores de la gig economy, o sea de aplicaciones como Uber y Lyft.
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De acuerdo al Washington Post, la propuesta de que se mantengan como contratistas es un hecho pues 58% de los votantes decidió que sería mejor mantener el acuerdo de contratista, en lugar de empleados, con lo que la Proposición 22 se mantendrá como ley y desecha la ley conocida como AB 5 destinada a otorgar a los conductores empleo, protecciones del salario mínimo, atención médica y beneficios como el desempleo y la licencia por enfermedad.
La relevancia de esta decisión, además de impactar en California, podría replicarse en otros estados de Estados Unidos, y el mundo, pues se trataba de una lucha que lleva meses orquestándose.
El esquema bajo el que trabajan los "socios repartidores" no se considera trabajo formal en México, aunque sí pagan impuestos (algo que, de momento, no hacen las propias empresas en el país). La Ley Federal del Trabajo define en el artículo 20 que se considera un trabajo formal cuando se establece un contrato individual de trabajo, con una adherencia a prestaciones como seguro social, aguinaldo y vacaciones, y donde se establecen obligaciones y derechos, por lo que esta decisión impacta en los antecedentes de futuras leyes en torno al tema.
Euromonitor calcula que tan solo en el rubro de entregas de comida, el valor anual de este mercado en Estados Unidos fue de 34,000 millones de dólares en 2018.
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