La compañía, que había logrado impulsar sus ganancias durante la pandemia, últimamente ha visto disminuir la demanda de sus servicios de transmisión.
Según datos de IBES de Refinitiv, Roku informó que espera un primer trimestre del 2022, con menores ingresos y espera ingresos por 720 millones de dólares, una baja en sus estimaciones si se compara este número con los 748.5 millones de dólares que estimaron los analistas.
Una de las causas principales a las cuales se atribuye este declive es por la escasez de chips y los aumentos de costos de flete, los cuales han afectado la producción del dispositivo de streaming de Roku.
La compañía reportó que atraer nuevos clientes seguirá siendo su principal prioridad, por lo que no aumentarán los costos de sus productos. Los márgenes brutos de la empresa también cayeron, alrededor de un 3%, en el trimestre reportado.
Por otro lado, se estima que las ventas de las televisiones permanezcan en niveles menores a los pre-pandémicos, suponiendo mayores retos para la empresa.