La configuración inicial es simple: se conectan los dos cables correspondientes y se abre la app de Sonos en un dispositivo Android o iOS. En mi caso usé un iPhone, y el proceso tomó varios minutos, en lo que la barra emitía un sonido para que la app la identificara y la conectara a la red Wi-Fi.
Después bastó con encender la televisión a la que estaba conectada, seleccionar la opción de audio externo y configurar su control remoto para que controlara el volumen de la barra, en mi caso, vía infrarrojos. En los dispositivos iOS existe una función llamada “Trueplay” que es una tecnología de Sonos que mide la acústica de la habitación en la que está la bocina para adecuarla a la misma, y que toma un par de minutos extra para realizar las mediciones con el micrófono del iPhone.
En ese punto ya podía escuchar el audio de la tele con mucha claridad y muy buen audio, pero a partir de ahí pude explorar el resto de las posibilidades que ofrece esta barra, y lo que la diferencia de productos similares. Antes de hablar de la calidad de audio vale la pena aclarar que las capacidades del ecosistema de Sonos, son las mismas con la Sonos Ray.
Al igual que con las otras bocinas de la marca, la app permite manejar diferentes fuentes de audio, vía Wi-Fi, desde Spotify o YouTube Music hasta estaciones de radio de todo el mundo, así como tener la opción de agregar más bocinas para crear un sistema surround, por ejemplo.
Pero una vez que nos concentramos en el sonido de esta barra, descubrimos que proporciona muy buen audio lo mismo para películas que para música. La mejor prueba es ver o escuchar contenido con el que ya estamos familiarizados, para poder percibir las diferencias. Pero aún con nuevas películas o música que no conocemos, es fácil notar la calidad de la Sonos Ray.
En la música, dependiendo del género, se aprecian con claridad los instrumentos, se escucha el efecto estéreo y, sorprendentemente para ser una barra, los tonos graves resaltan sin distorsionar.
Al ver programas de TV, el audio es claro y potente, y sin tratarse de un sistema surround, logra manejar los efectos en que los sonidos van de un lado a otro, en películas de acción o en escenas que los usan. Aunque no en muchos casos fue necesario usarlo, la app de Sonos ofrece una opción llamada “mejora del discurso” que resalta las voces -haciéndolas un poco más agudas- y otra llamada “sonido de noche”, que está pensado para cuando ves la tele de noche y quieres evitar sonidos muy fuertes.
Con la misma app se tiene acceso a un ecualizador de graves y agudos y a la función “Trueplay” descrita anteriormente. La barra tiene sus bocinas y componentes dirigidos al frente, y en la parte superior cuenta con controles táctiles de volumen y reproducción/pausa/avance, además de un indicador LED que se activa cuando el sonido de la tele está silenciado.
Precio de Sonos Ray en México
La Sonos Ray funciona perfecto en una sala o habitación pequeña, y mejora la experiencia de una TV “viejita” o nueva, cuando se busca audio de calidad que no sea en formatos envolventes como Dolby Atmos.
La diferencia con la barra que le sigue, la Sonos Beam, es el control por voz, un par de bocinas más que le dan más potencia y los formatos de audio más avanzados.
Y por supuesto, el precio, aproximadamente cinco mil pesos extra. Sin embargo, la Sonos Ray mantiene, además de todas las funciones de software, el soporte al formato Airplay 2 de Apple, y un conector de red Ethernet. El precio oficial en México es de $6,000 pesos y estará disponible en colores negro y blanco a partir del 7 de junio.