El regreso de un viejo conocido
Fue en 2018 cuando Apple lanzó por primera vez al mercado su HomePod , sumándose así a la competencia en el mercado de bocinas inteligentes y aunque tuvo buenas reseñas por parte de los usuarios clave de la marca e incluso llevó al lanzamiento de su versión mini en 2020, la tecnológica decidió ponerle pausa a su producción en 2021.
Ahora, con este regreso, de entrada podemos notar un par de cosas que ya considero que son favorables para el producto. La primera, es que gracias a que Apple sigue invirtiendo en sus chips (en este caso el S7) y en el avance de su audio computacional, esta bocina que promete que puede adaptar el sonido a cada espacio de la casa cumple con el cometido y esto lo pude comprobar moviéndola y escuchando música mientras cocinaba, colocada en una repisa con una pared y muchos objetos alrededor, pero también al ponerla en medio de la mesa de comedor con espacio libre o en una mesa exterior.
En todos los casos se notó cómo el audio se ajustaba para intentar dar lo mejor de sí y esto no solo tenía que ver con su espacio sino también con el tipo de música que se escuchaba (aunque he de confesar que mi rango musical no es tan variado, sí se notaba la diferencia de ecualización entre canciones con muchos bajos, muchas cuerdas, muchas voces).
En términos de audio, veo cómo ahora la posibilidad de emparejar dos HomePod es tal vez la mejor vía de coexistir con este producto, aunque se tenga que contemplar la doble inversión, ya que la experiencia de sonido sí es relevante, incluso cuando se usa en temas de entretenimiento. Ojo cuando hablamos de generar un par estéreo, esto solo funciona con dos HomePod de la última generación, no te será posible unir un HomePod anterior.
La segunda, es que su diseño sigue siendo de gran calidad. No solo es estéticamente agradable a la vista, sino también es funcional con su malla de tela sin costuras, el tamaño es el apropiado para poder estar en diferentes espacios sin ser intrusivo y la superficie táctil en la parte superior responde al instante.
Ahora, otras de las novedades de esta HomePod está en una reducción en el número de tweeters (de siete a cinco) y de micrófonos (de seis a cuatro), sin embargo, esto no tiene relevancia a la hora de su desempeño.
Algo más que se agradece, es que el cable se puede desconectar del propio dispositivo, así que se vuelve mucho más sencillo almacenar.
Otra parte que es relevante para las casas cada vez más conectadas es la integración del sensor de temperatura y humedad que permite controlar estos sistemas desde la HomePod y el sistema de detección de sonido, que por ejemplo, si escucha una alarma dentro de la casa es capaz de enviar una notificación al teléfono del usuario para alertar que algo está pasando.
Consideraciones si quieres una HomePod
Lo primero que hay que tener en cuenta es que este es un producto al que se le puede sacar el mayor provecho si se es un usuario core de Apple. Es decir, si tienes un Apple TV, si usas HomeKit para hacer de tu casa un hogar inteligente, si tienes varias bocinas inteligentes de Apple en tu casa y puedes entonces aprovechar la función de Intercom, si tú asistente del día a día es Siri y tu servicio predilecto de música es Apple Music. Si es así, esto no tiene comparación y solo viene a complementar la experiencia que ya tienes y llevarla a otro nivel en términos de calidad de audio.
En esta versión no podrás reproducir música de Spotify -pero sí de otros servicios que no son Apple Music-, ni podrás manipular ni conectar la HomePod desde un Android (vale la pena aclarar).
Lo que sí podrás hacer es lograr que esta bocina inteligente te escuche claramente en casi cualquier circunstancia gracias a sus micrófonos, lograr que el sonido viaje de cuarto a cuarto si es que tienes otras HomePod aún de versiones anteriores conectadas en otras habitaciones y tener una experiencia de audio excepcional sin importar el volumen o el espacio en el que la experimentes.