Los temas por los cuales existe preocupación ya han tenido una disputa legal para la compañía. En el caso de iMessage, Apple tuvo una disputa con la empresa Beeper, la cual había logrado llevar a los teléfonos Android la popular app de mensajería instantánea. En respuesta, Apple bloqueó a Beeper argumentando preocupaciones en torno a la privacidad de los usuarios.
Respecto al Apple Watch, la compañía recibió una demanda por parte de la empresa de tecnología médica, Masimo, debido a que supuestamente infringieron una patente, lo cual dio como resultado que Apple no pudiera vender sus dispositivos de última generación a partir del 26 de diciembre en Estados Unidos.
Por el momento, los resultados de la investigación siguen en proceso y deben ser evaluados para determinar si es que Apple ha abusado de su poder en estos campos para perjudicar la competencia.
Se espera que representantes de Apple se reúnan con el Departamento de Justicia para abordar los argumentos y preocupaciones, pero el hecho de no lograr convencer a las autoridades significaría el posible inicio de una demanda federal antimonopolio.
Las demandas antimonopolio no son nuevas en Apple. El caso más relevante fue su batalla contra Epic Games por sus comisiones al hacer transacciones a través de su tienda, el cual resultó en un caso interesante, pues la jueza obligó a Apple a permitir métodos de pagos de terceros (un cambio que no se ha ejecutado), pero también determinó que no se trata de un monopolio.
Tras darse a conocer esta posible investigación, las acciones de Apple cayeron menos del 1%. Los analistas destacan que si bien Apple es una empresa saludable, las preocupaciones en torno a los riesgos legales también se han intensificado en los últimos meses.
Por otra parte, el gobierno estadounidense tiene en claro que las compañías de tecnología son algunas de las más poderosas y buscan limitar esas capacidades. En diciembre Google fue sancionada con una multa de 700 millones de dólares por su dominio en la Play Store, además de estar en medio de otro juicio por su poder en el ámbito de las búsquedas.
Amazon, por otro lado, también tiene en curso un juicio antimonopolio que inició en septiembre de 2023, bajo el argumento de abusar de su dominio en el mercado del comercio electrónico para eliminar la competencia.