El índice Nikkei apunta que la empresa surcoreana tuvo pérdidas en este año en esta división, pero que el enfoque por el uso de IA y la incorporación de su propio procesador les podría ayudar a recuperar terreno. En cifras, el departamento de semiconductores tuvo una pérdida de 14,880 millones de wones (poco más de 10 millones de dólares) lo que representó un golpe para la división que llevaba 15 años sin pérdidas.
“La IA requiere potencia informática y memoria, y que el hardware en sí debe soportar los requisitos mínimos para que el modelo de IA se ejecute en el dispositivo. Los dispositivos también pueden aprovechar las capacidades de otros dispositivos dentro del ecosistema para proporcionar suficiente potencia informática”, señaló Kim.
El foco de Samsung en su última familia de smartphones premium, la S24, está en el conjunto de software y hardware, pues la empresa anunció la integración de IA generativa en varias aplicaciones, como llamadas traducidas en vivo, búsqueda desde imágenes en la red y una suite de traducción simultánea y resumen que se han visto en los lanzamientos de las nuevas versiones de Gemini y Bard.
La IA por lo tanto no sólo es una apuesta para vender más smartphones, sino también semiconductores. Kim admitió que tuvieron que desarrollar un software con mayores estándares de seguridad, y con una capacidad muy grande de procesar datos en tiempo real y que a la vez sean flexibles.
Por ejemplo, en el caso de la traducción en vivo de llamadas, Kim fue cuestionado por Expansión sobre la dificultad de tener distintos acentos en el Español, ya que el español de Colombia, España y México usan distintas palabras que podrían dificultar una traducción, por lo que Kim señaló que esto es uno de los desafíos que buscan pulir con el uso de los teléfonos.
“Tuvimos mucha investigación en este tema y las bases de datos de hablantes con distintos acentos requieren justo de este procesamiento más poderoso”, apuntó el ejecutivo.
IA como extra
Las tecnologías de inteligencia artificial continúan creciendo, y en el caso de Samsung su negocio de semiconductores puede recuperarse para respaldarlas. En el lanzamiento que tendrán en México dos de los tres teléfonos que llegarán al país vendrán con el procesador de casa, mientras que el Ultra mantendrá la alianza que hizo hace años Samsung con Qualcomm y usarán el Snapdragon Gen 8 como impulsor.