Johansson destacó que rechazó la oferta de Altman por motivos personales, pero al detectar que la voz era “inquietamente similar” a la suya se sorprendió, enojó y sintió incredulidad, incluso por el hecho de que el ejecutivo usó la palabra Her para promocionar su sistema tras la presentación.
Incluso señaló que un par de días antes del lanzamiento de GPT-4o, el equipo de Altman se volvió a contactar con su agente y le solicitó reconsiderar su decisión; sin embargo, antes de que pudieran establecer comunicación con él, el sistema ya se había mostrado al público.
Johansson pide que se explica cómo se hizo la voz
Ante esta situación, la actriz contrató asesoría legal y envió un par de cartas pidiendo que detallaran “el proceso exacto mediante el cual crearon la voz de Sky” y como consecuencia OpenAI aceptó eliminar la voz del chatbot.
De acuerdo con la empresa, Sky -nombre que recibe la voz- no imita a la actriz de Hollywood. De hecho, “pertenece a una actriz profesional diferente que usa su propia voz natural”, según el comunicado.
Asimismo, Altman dijo a The Verge que la voz de Sky no es la de Johansson y “nunca tuvo la intención de parecerse a la de ella”. Puntualizó que la actriz de doblaje se eligió antes de contactar a Johansson y por respeto a ella decidieron eliminar a Sky de sus productos.
La empresa también destacó que su tecnología se desarrolló a partir de voces reales con el fin de que ChatGPT tuviera más naturalidad a la hora de interactuar con las personas. Incluso el año pasado se lanzó una convocatoria donde participaron más de 400 actores de doblaje.
“En una época en la que todos lidiamos con los deepfakes y la protección de nuestra propia imagen, nuestro trabajo, nuestras identidades, creo que estas son preguntas que merecen una claridad absoluta. Espero una resolución en forma transparente y la aprobación de una legislación apropiada para ayudar a garantizar que los derechos individuales estén protegidos”, concluyó Johansson.