El Supremo Tribunal Federal de Brasil, donde Moraes tiene un escaño, dijo a Reuters que no se pronunciaría sobre el asunto y que no confirmaría ni negaría la autenticidad del documento compartido por X.
A principios de este año, Moraes ordenó a X bloquear ciertas cuentas, mientras investiga a las llamadas "milicias digitales" que han sido acusadas de difundir noticias falsas y mensajes de odio durante el gobierno del expresidente de extrema derecha Jair Bolsonaro.
Moraes abrió una investigación a principios de este año contra el multimillonario, después de que Elon Musk dijo que reactivaría cuentas en X que el juez había ordenado bloquear. Musk calificó de "inconstitucionales" las decisiones de Moraes sobre la red social.
Tras los desafíos de Musk, los representantes de X dieron marcha atrás y dijeron al Supremo Tribunal Federal de Brasil que el gigante de las redes sociales cumpliría las sentencias judiciales.
Los abogados que representan a X en Brasil dijeron en abril al Supremo Tribunal Federal que "fallos operativos" habían permitido a los usuarios a los que se había ordenado el bloqueo seguir activos en la plataforma de redes sociales, después de que Moraes pidió a X que explicara por qué supuestamente no había cumplido plenamente sus decisiones.
Musk, en publicaciones en X este sábado, calificó a Moraes de "vergüenza absoluta para la justicia" y dijo que la empresa no podía haber accedido a las "exigencias de censura secreta y entrega de información privada" del juez.
Linda Yaccarino, directora ejecutiva de X Corp, también publicó que hoy es un "día increíblemente triste para el pueblo de Brasil".
Aunque X cierre operaciones en el país latino, la red social seguirá estando disponible para los usuarios de Brasil, aseguró la plataforma.
Una X en blanco y negro
En mayo pasado, Musk anunció en la red social X que todos los sistemas fundamentales de su plataforma, anteriormente conocida como Twitter, ya estaban activos bajo el nuevo dominio "X.com", oficializando así su nueva identidad.
Desde finales de julio del año anterior, el logo de la red social había cambiado a una X en blanco y negro, pero el dominio seguía siendo "Twitter.com", lo cual había sido uno de los aspectos más complicados de la transición para Musk.
X.com no es un nombre nuevo para el empresario, ya que originalmente fue el dominio de su banco digital fundado en 1999, que posteriormente se transformó en el servicio de pago en línea PayPal.
Desde la adquisición de Twitter en 2022 por 44,000 millones de dólares, Musk ha expresado repetidamente su intención de convertir la plataforma en una súper aplicación multifuncional, similar a WeChat en China, que incluya servicios financieros.
El símbolo de la X ha sido recurrente en los proyectos de Musk, como en la compañía aeroespacial SpaceX, la empresa X Corp que adquirió Twitter, y su reciente emprendimiento en inteligencia artificial (IA), además de ser parte del nombre de su hijo, X Æ A-12.
Desde el lanzamiento de la interfaz de IA generativa ChatGPT por OpenAI, la tecnología ha estado en el centro de una intensa competencia entre gigantes del sector como Microsoft, Google, Meta, y empresas emergentes como Anthropic o Mistral AI.
Recientemente, Musk también anunció XTv, una aplicación para transmitir contenido en streaming a televisores, que competirá directamente con plataformas como YouTube. Aunque aún está en desarrollo, no se ha revelado una fecha de lanzamiento para la aplicación.
Con información de Reuters.