DeepSeek generó alarmas entre los empresarios e inversionistas, pues puso en duda las grandes cantidades de dinero que se han desembolsado en otras empresas del sector, como OpenAI, para entrenar y ejecutar grandes cargas de trabajo avanzadas en modelos de Inteligencia Artificial.
La entrada de este jugador hizo borrar alrededor de 600,000 millones de dólares de la capitalización de mercado de Nvidia, una cifra equiparable a la industria automotriz, si se excluye a Tesla. No obstante, las grandes tecnológicas ya se han recuperado del sorpresivo golpe chino.
Por otra parte, las big tech ya han hecho importantes anuncios en términos de inversiones. Este martes, Google dio a conocer que aumentaría los gastos de capital a 75,000 millones de dólares este año (un aumento del 42%) para acelerar su progreso en IA, mientras que Meta también había anunciado su intención de gastar más de 60,000 millones de dólares en 2025, principalmente para centros de datos para el entrenamiento de su IA.
Dan Ives, director ejecutivo y analista sénior de investigación de acciones en Wedbush Securities, resalta que la entrada de DeepSeek al panorama tecnológico representa un impulso para la innovación de las empresas de origen estadounidense.
"No se trata solo de que los fuertes se hagan cada vez más fuertes. Habrá mucha más competencia, pero también mucha más innovación. Esta es una cuarta revolución industrial que beneficiará a más que sólo siete empresas tecnológicas", señala en referencia a Nvidia, Apple, Microsoft, Meta, Google, Amazon y Tesla. “Esto no arruina ni daña la revolución de la IA en los Estados Unidos”.
Reyna también destaca que el liderazgo de la carrera por la IA aún lo mantiene EU, pero China ha mostrado avances importantes y cada vez está reduciendo la distancia con las grandes firmas norteamericanas. “Prueba de esto son las grandes inversiones, la apuesta por la educación, así como la gran cantidad de patentes, pero sobre todo la alta innovación mostradas por las entidades chinas”, afirma.
Por su parte, el profesor en marketplace de la NYU y analista tecnológico, Scott Galloway, puntualiza que la gran aportación de DeepSeek a la conversación tecnológica es que ha puesto en duda el modelo actual del hardware de IA. “La mayoría de las empresas de IA han adoptado una estrategia de fuerza bruta donde compran tantos chips como sea posible, sin embargo, esto dice que tal vez no necesitan tantos chips”.
El potencial de China en la IA
Luego de que DeepSeek tomara por sorpresa a los mercados, Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, acusó a la empresa china de haber usado datos generados por su compañía para enseñar a su modelo habilidades similares a las de ChatGPT.
Este proceso se le conoce como “destilación” en el argot tecnológico, pero está prohibido según las condiciones de servicio de OpenAI para empresas que compitan en el mismo mercado que ella, como DeepSeek, la cual, además de todo, tendría conexiones con el gobierno chino, según la startup originaria de San Francisco.
Al respecto, Galloway, afirma que el panorama de la IA se va a bifurcar en una capa barata y otra de gama alta. “Al final, todo se convertirá en Walmart/Tiffany's y este (DeepSeek) podría ser el Walmart”, señaló.
Reyna destaca el hecho de que a pesar de las complejidades en el entrenamiento de la IA china, es una demostración del potencial tecnológico del gigante asiático. “Esto representa un fuerte golpe y mensaje que desestabiliza primero al sector tecnológico, pero en cascada cimbra también a otros sectores”, concluye. “Considero que estamos en la antesala y el reacomodo de los grandes protagonistas tecnológicos”
Asimismo, Galloway aporta que será una oportunidad de que grandes competidores, como Nvidia, tengan voz ante el Capitolio y pidan un retorno al mercado chino bajo el argumento de que cuando se le niega la venta en estos países, encuentran alternativas y, en este caso, “podría hundir la economía estadounidense".