Por otro lado, la Academia Española de Cine anunció cambios en las bases de la próxima edición de los premios Goya, en donde resaltó que sólo podrán participar “aquellas obras cuya creación y desarrollo artístico estén liderados por personas físicas identificables”, además de que el uso de IA se permitirá únicamente en frases de desarrollo, “siempre que no sustituya la autoría humana”.
De acuerdo con el Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor), un autor es la persona física que crea una obra literaria, artística o científica, es la titular de los derechos morales sobre la obra, que son inalienables, imprescriptibles, irrenunciables e inembargables sobre esa obra.
Entre algunos de los efectos que tiene esta tecnología uno de los más representativos se dio en febrero del año pasado, cuando Tyler Perry , propietario de un estudio de grabación en Atlanta, canceló una inversión de 800 millones de dólares para la expansión del estudio, debido a que OpenAI lanzó su herramienta de video.
“Que te digan que puede hacer todas esas cosas es algo, pero ver realmente sus capacidades fue alucinante”, dijo Perry en una entrevista a The Hollywood Reporter, donde agregó la necesidad de una regulación que proteja a la industria creativa. “Si no, simplemente no veo cómo sobreviviremos”.
El cambio de paradigma en Netflix
La semana pasada, durante la presentación de resultados del segundo trimestre, Ted Sarandos, codirector ejecutivo de la empresa, reveló que la plataforma ya utiliza Inteligencia Artificial generativa para ayudar en la producción de series y películas, a pesar de las polémicas por el uso de esta tecnología en la industria creativa y su potencial de eliminar puestos de trabajo.
El ejecutivo confirmó que el primer material generado por una IA se encuentra en la serie argentina El Eternauta y según sus declaraciones, se trata de una escena del derrumbe de un edificio, en la cual trabajó un equipo de producción interno de la empresa. El tiempo que tomó crear la imagen fue 10 veces más rápido a comparación del uso de herramientas de efectos visuales tradicionales, además de que costó menos.
“Seguimos convencidos de que la IA representa una oportunidad increíble para ayudar a los creadores a mejorar sus películas y series, no sólo abaratarlas”, comentó Sarandos, quien señaló, entre otros usos, la planificación de tomas y los efectos visuales.
Asimismo, hizo hincapié en la posibilidad de que los equipos de producción con menores oportunidades de inversión también tengan disponibilidad de recursos digitales para contar sus historias. “Antes, sólo los proyectos de gran presupuesto tenían acceso a efectos visuales avanzados, como el rejuvenecimiento de la imagen”, señaló.
Por su parte, Greg Peters, coCEO de la empresa, también afirmó que usan IA para otros procesos, como la personalización del contenido y la publicidad, además de que la empresa planea lanzar anuncios interactivos en la segunda mitad del año.
No obstante, el uso de IA en procesos creativos ha sido muy criticada por su potencial de eliminar puestos de trabajo, además de replicar rostros y voces de actores y actrices digitalmente sin su consentimiento, abaratando las producciones y no reconociendo la labor de los artistas.
El caso inédito en Bollywood
En la India, la startup con sede en la ciudad de Chandigarh, Intelliflicks Studios , tiene planeado lanzar un largometraje hecho casi en su totalidad con herramientas de IA generativa a finales de este año.
De acuerdo con Gurdeep Pall, uno de los ejecutivos del estudio, se están utilizando herramientas de IA comerciales y gratuitas para el desarrollo del largometraje (aunque no especificaron cuáles), en áreas como la creación de personas, producción de audio y diálogos.
Según su sitio web, la misión de la empresa es “explorar todo el potencial creativo de la inteligencia artificial en la realización cinematográfica. Creemos que la IA no está aquí para reemplazar la imaginación humana, sino para expandirla, desbloqueando nuevas formas de concebir, crear y experimentar historias”.
Además, resalta que la línea ética de la compañía se basa en el respeto tanto por la visión de los escritores, el instinto de los directores y la mirada de los editores; sin embargo, agrega que “la IA no está aquí para reemplazarlos. Está aquí para apoyarlos: para abrir nuevas posibilidades, para eliminar barreras, para dar vida a ideas audaces con mayor libertad y control”.