El Real Madrid no pudo celebrar su decimotercera Liga de Campeones como hubiera querido. Pocos minutos después de la victoria por 3-1 en la final contra el Liverpool en Kiev, Cristiano Ronaldo lanzaba una bomba dejando entrever que podría dejar el equipo.
"Fue muy bonito estar en el Madrid. En los próximos días daré una respuesta a los aficionados, que ellos siempre han estado a mi lado", afirmó el portugués.
¿Se trataba de la última pataleta de Cristiano Ronaldo, al que le gusta el protagonismo, tras ser eclipsado el sábado por Bale o por los rumores de la llegada de Neymar para hacerle sombra?
El capitán madridista, Sergio Ramos, conocedor de la personalidad de Cristiano Ronaldo, le regalaba los primeros mimos tras la bomba lanzada por el portugués.
"Ya veremos. A Cris le gusta dejarse querer y estamos encantados de que siga, no va a encontrar un sitio mejor, es nuestro crack. Ojalá se quede muchos años", afirmó Sergio Ramos.
Cristiano Ronaldo se dio cuenta poco después que esas declaraciones no habían llegado en el momento ideal, en plena celebración.
"Quizá no debí decir lo que dije. No era el momento adecuado y cuando eres honesto te sale", dijo después. "Ya he hablado con mi agente. No me ha calentado nada. Son situaciones que vienen de algún tiempo y te descontrolas. Las cosas no se solucionan con dinero", añadió.
Menos de 24 horas después, durante las celebraciones del título ya en Madrid, Ronaldo pareció dar marcha atrás y fijar su futuro en el club: "Gracias chicos, nos vemos el próximo año", dijo a los aficionados concentrados en Cibeles para festejar el título.
El interés del Real Madrid por Neymar pudo detonar la bomba para que el portugués hablara.
"Cristiano Ronaldo lleva tiempo somatizando la rabia que le da ver cómo el Real Madrid traza una estrategia para fichar a Neymar. Si no es este verano, será el siguiente, pero el portugués lo tiene claro porque maneja información que el brasileño es el deseo de Florentino Pérez", afirmaba el domingo El Confidencial.
Cristiano Ronaldo rechazó que sus palabras se basaran en una crisis de celos por Neymar.
"Tengo cinco Champions, cinco Balones de Oro. No voy a envidiar a nadie", dijo.
Una hipotética marcha de Cristiano Ronaldo pondría tal vez el fin de ciclo a una época gloriosa de un equipo, liderado por el portugués, que ha ganado cuatro Ligas de Campeones en las últimas cinco ediciones (2014, 2016, 2017, 2018)