Todas las atracciones que no te puedes perder en Dublín
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(CNN) - Cuando viajas a Dublín no tardas mucho en descubrir que esta no es la capital de un antiguo imperio remoto como el de Londres, Madrid o Roma.
Aunque carece de edificios masivos y antiguos monumentos a la grandeza imperial del pasado, Dublín rebosa de encanto amistoso y accesible en un entorno hecho más a escala humana. Es realmente uno de los grandes destinos de Europa, si no es que del mundo.
Esta es una de las ciudades capitales más pequeñas de Europa, con poco más de medio millón de personas, pero tiene incontables lugares para ver. Te presentamos una lista de las grandes atracciones que te esperan en la capital irlandesa:
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Galería Nacional de Irlanda
Irlanda es un país conocido por sus contribuciones a la literatura, pero no hay que olvidar sus contribuciones al mundo artístico, muchas de las cuales se encuentran en la Galería Nacional, que exhibe una serie de obras de Rembrandt, Goya y Monet.
Las 15 mil obras irlandesas y europeas de la colección abarcan de los siglos XIII al XX e incluyen pinturas, grabados y retratos.
Particularmente apreciada es la Colección Yeats, que comprende obras y otros materiales relacionados con el pintor irlandés Jack B. Yeats, hermano del poeta y dramaturgo W.B. Yeats.
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Antigua destilería Jameson
La historia de la Old Jameson Distillery se remonta a 1780 y realmente es una visita obligada en Dublín. Esta visita guiada inicia con una breve película informativa y es conducida por guías que realmente saben lo que hacen.
El recorrido cubre los conceptos básicos de la destilación del whisky, explica lo que distingue a Jameson y culmina con una degustación gratuita.
Sugerencia: colócate al frente del grupo y actúa rápidamente cuando el guía solicite voluntarios porque al final del recorrido te dará una degustación extendida.
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Puente Ha'penny
Este modesto puente de hierro fundido sobre el río Liffey se ha convertido en el símbolo de Dublín, con su diseño ornamentado y pintorescas farolas. El puente Ha'penny se llama así por el costo que cobraran por cruzarlo, medio penique.
Antes de ser una atracción turística, el puente Ha'Penny daba un agradecido servicio a la gente que trabajaba. Cuando se construyó en 1816 fue el primer puente de hierro que cruzaba el Liffey. Antes de su construcción, la mayoría de los peatones tenían que cruzar el río en ferry.
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Castillo de Dublín
Estando en Europa es difícil resistirse a un buen castillo y tienes uno justo en el corazón de Dublín. Como todos estos buenos complejos, tiene historia: desde su inicio en los años 1200 en el sitio de un asentamiento vikingo hasta 1922, cuando fue entregado al nuevo gobierno irlandés después de la independencia del Reino Unido.
Un incendio en 1684 dañó buena parte del castillo medieval y, en la reconstrucción, algunas partes tomaron el aspecto de un palacio georgiano, creando una interesante mezcla de estilos.
Está abierto todos los días de la semana para visitas guiadas, pero asegúrate de consultar su sitio web en caso de que esté cerrado por asuntos gubernamentales.
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Parque St. Stephen's Green
Aunque tendrás la oportunidad de disfrutar hermosas tonalidades verde en toda Irlanda, no dejes de visitar este parque en el corazón de Dublín.
El parque cuenta con esculturas de las principales figuras de la historia de Irlanda, así como motivos victorianos exquisitamente conservados en el centro. Los sicómoros y otros árboles se alinean en el perímetro para ayudar a amortiguar el ruido de la ciudad, y es un refugio tanto para las aves como para las personas.
Está abierto todo el año, incluso en Navidad, y es muy fácil llegar desde la Galería Nacional.
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Catedral de San Patricio
St. Patrick o San Patricio es la Catedral Nacional de la Iglesia de Irlanda. Puedes visitarla como turista o puedes asistir a un servicio religioso.
Se cree que el mismo San Patricio bautizó a personas en el sitio alrededor del año 445. La construcción de la actual catedral comenzó en el siglo XIII, y tuvo una gran renovación en el siglo XIX. El edificio ha resistido tormentas, fuego y tiempos tumultuosos. Puedes admirar el arte gótico y visitar la tumba de Jonathan Swift, el autor de Los viajes de Gulliver.
Como ocurre con muchos sitios de este tipo, conviene llegar temprano en la mañana y sumergirse en la atmósfera en relativa paz antes de que lleguen las multitudes.
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Barco Jeanie Johnston
Uno de los periodos más devastadores en la historia de Irlanda fue la gran hambruna de la década de 1840. Una plaga de la papa causó la hambruna generalizada y la ruina económica. La población de Irlanda de 8.4 millones en 1844 había descendido a 6.6 millones en 1851. Incluso hoy, el país nunca ha regresado al nivel de población previo a la plaga. Muchos irlandeses huyeron al llamado Nuevo Mundo.
El barco Jeanie Johnston era una de las naves que navegaban por el Atlántico para llevar a la gente a esas nuevas vidas. Hizo su viaje inaugural el 24 de abril de 1848, de Irlanda a Quebec, Canadá, con 193 pasajeros. Durante los siguientes siete años se realizaron 15 viajes más sin pérdida de vidas.
Hoy, los visitantes pueden abordar el barco restaurado y ver las difíciles condiciones bajo las cuales navegaban estos emigrantes. El recorrido dura poco menos de una hora.
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La Biblioteca del Trinity College
Una parada obligada para cualquier neófito de Dublín es el Trinity College, equivalente en Irlanda a una universidad de la Ivy League estadounidense, por su alto prestigio. Su antigua biblioteca es realmente digna de contemplar, son antiguas estanterías de madera que parecen subir y bajar por kilómetros.
La entrada incluye una visita al Book of Kells, un manuscrito de los Evangelios que los monjes celtas decoraron a mano en el siglo IX.
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Museo de Historia Natural
Este museo abrió sus puertas en 1857 y desde entonces ha estado educando a los visitantes sobre el mundo natural.
En la planta baja, la sala irlandesa está dedicada a mamíferos, aves, peces e insectos nativos de la isla. En otras exhibiciones encontrarás criaturas no tan nativas: un elefante, un oso polar y algunos leones. El museo tiene una sala de lectura si deseas más información.
Para evitar las aglomeraciones de los fines de semana, el museo aconseja venir de martes a viernes. Está cerrado los lunes.
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Museo de los Escritores
Las contribuciones de Irlanda al mundo literario se recuerdan en este modesto pero atractivo museo.
El espacio cubre tres siglos de literatura irlandesa, con exposiciones que muestran la vida, obras, materiales y objetos personales de algunos de los iconos literarios del país, desde W.B. Yeats a Frank McCourt.
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Guiness Storehouse
Tú sabes el nombre y es posible que hayas disfrutado de esta marca de cerveza una o dos veces. Ahora es el momento de ver cómo sucede la magia Guinness.
En siete pisos aprenderás sobre la historia de la cerveza Guinness y su elaboración en Irlanda. Tendrás la oportunidad de propar la cerveza negra que ha deleitado el paladar de Irlanda y de todo el mundo. Dato curioso: ¿sabías que Nigeria es en realidad el mercado más grande para Guinness?
También hay restaurantes en el lugar para que no tomes tus muestras de cerveza con el estómago vacío.
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Grafton Street
La principal zona comercial de Dublín pasa por el centro de la ciudad, al sur del río Liffey. Una zona peatonal durante el horario comercial, Grafton Street debe mucho de su encantador ambiente al ladrillo rojo con el que fue pavimentada.
Extendiéndose por varias cuadras, la calle Grafton es el equivalente irlandés de una avenida principal británica, con muchas tiendas internacionales y locales y el famoso centro comercial Brown Thomas, en caso de que quieras darte un capricho en Chanel o Gucci.
En el extremo sur se encuentra el centro comercial Stephen's Green, una hermosa galería comercial victoriana hogar de marcas conocidas.
Ten en cuenta que puede estar increíblemente saturada de compradores, especialmente un sábado.
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Drury Street
Para comer, beber, comprar y pasear, evita la zona turística de Temple Bar y dirígete a Drury Street, a pocas calles al oeste de Grafton Street.
Puedes visitar las peculiares tiendas y puestos del mercado George's Street Arcade, comprar algunos recuerdos en Irish Design Shop e Industry and Co, y luego tomar un refrigerio en Kaph o Blazing Salads.
A poca distancia están lugares legendarios para beber como The Hairy Lemon, Grogans, The Long Hall y el Library Bar del Central Hotel, así como algunos locales más recientes como Fade Street Social.
After work drinks on the Fade Street rooftop terrace#FadeStreetSocial pic.twitter.com/Dq7NGQIyxy
— Fade Street Social (@FadeStSocial) August 31, 2018 -
Librería Gutter
Mientras muchas de las librerías pequeñas e independientes han desaparecido en Dublín, The Gutter se ha mantenido como un pequeño faro de la bondad de los libros en el Temple Bar.
Aunque es más limpia, ordenada y linda de lo que cabría esperar de una librería boho o bohemia, The Gutter cuenta con una amplia selección de libros (incluida, naturalmente, una maravillosa sección de autores irlandeses), así como con personal que realmente los ha leído. The Gutter también ofrece actividades, como grupos de lectura, presentaciones de libros y curiosos talleres culturales.
And we're all back to normal! Open 10am-6.30pm today & in no way are we jealous of the UK Bank Holiday today... not one bit... nope... #EnjoyYourLieIn pic.twitter.com/SgtuevYxnN
— Gutter Bookshop (@gutterbookshop) August 27, 2018