La semana pasada, el Tribunal del Distrito Este de Nueva York recibió el caso de una demanda presentada por Justin Chimienti, originario del condado de Suffolk, contra Wendy’s y McDonalds.
En la denuncia, dice que el restaurante “exagera materialmente” casi todos los elementos del menú, incluyendo su icónica Bourbon de Wendy’s. Y a McDonalds la acusa de lanzar promociones engañosas similares, incluyendo la popular BigMac.
“Los anuncios de los demandados para sus hamburguesas y artículos del menú son injustos y perjudican financieramente a los consumidores, ya que reciben alimentos de un valor mucho menor que el prometido”, dice la demanda.
Además, Chimienti, quien pretende que más clientes indignados se adhieran a la denuncia, alega que, si bien el tratamiento estilístico de los productos es una práctica usual en la publicidad, McDonalds y compañía anuncian porciones más grandes “para llevar a los consumidores lejos de los competidores”.
Tres bufetes de abogados respaldan la demanda colectiva: James C. Kelly, The Russo Firm y Panzavecchia & Associates. Legalmente, se denuncia la violación de leyes estatales de protección al consumidor, incumplimiento de contrato y tergiversación negligente e incluso “enriquecimiento injusto”:
Y, además de buscar una reparación del daño en términos monetarios, la demanda busca una orden judicial para detener de inmediato la publicidad engañosa.
Burger King también ha sido enfrentado
No es la primera vez que se presenta una demanda colectiva de este tipo, las mismas firmas de abogados respaldan una demanda similar contra Burger King, pero en Miami, Florida.
En marzo, los usuarios de redes sociales reaccionaron a la presentación de esta denuncia por publicidad engañosa, donde se alega que los anuncios presentan hamburguesas 35% más grandes que las de la vida real.
“Se supone que esta es la nueva Bourbon Bacon Burger?, pregunta un usuario en Twitter y pone la fotografía de la hamburguesa que le vendieron en Wendys por 9 dólares o casi 180 pesos mexicanos.
En Estados Unidos, medios como el Washington Post, The Hill o Yahoo han solicitado la postura de las empresas, sin recibir respuesta.