El Producto Interno Bruto británico se debilita en el inicio de 2016
El Producto Interno Bruto (PIB) británico se desaceleró a principios de este año, golpeado por la debilidad de la economía global y la incertidumbre previa al referéndum de este año sobre la membresía del Reino Unido a la Unión Europea (UE), en momentos en que depende del sector de servicios para generar crecimiento.
El PIB del primer trimestre creció 0.4%, por debajo de 0.6% registrado en los tres meses a diciembre de 2015, y en línea con los pronósticos de economistas de una expansión de 0.4%, dijo este miércoles la Oficina Nacional de Estadísticas.
Lee: La votación sobre el ‘Brexit’: una guía de los próximos dos meses
Los economistas acertaron en que la débil economía global y las dudas sobre el futuro de Gran Bretaña en Europa contribuyeron a la desaceleración.
"Considerando que en el próximo trimestre probablemente también se vean algunas preocupaciones previas al referéndum, parece que el segundo trimestre tendrá una lectura de crecimiento leve del PIB", dijo Martin Beck, economista de la consultora EY ITEM Club.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) advirtió este miércoles que el amplio déficit de cuenta corriente de Gran Bretaña podría ser más difícil de financiar y que la libra podría caer si decidiera dejar el bloque europeo.
Recomendamos: Estas son las principales posturas a favor (y en contra) del 'Brexit'
La libra se recuperó desde un mínimo intradiario contra el dólar después de que los datos estuvieron en línea con lo esperado por los economistas.
El crecimiento en el primer trimestre estuvo liderado en soledad por el sector servicios, que se expandió 0.6%, comparado con el cuarto trimestre de 2015. En cambio, la producción industrial y del sector de la construcción cayeron 0.4% y 0.9%, respectivamente.
La producción manufacturera y la construcción sufrieron las caídas más drásticas en términos anuales desde comienzo de 2013. Si bien la demanda de los consumidores —pilar del crecimiento de la economía británica— se mantuvo sólida, las ventas minoristas cayeron en marzo a su ritmo más veloz desde enero de 2014, sumando a las señales de desaceleración.
