Trump está dispuesto a ceder en negociación del TLCAN
El presidente Trump atacó al acuerdo de libre comercio con Canadá y México (TLCAN) en muchas ocasiones durante el año pasado, y ha amenazado con terminar con el acuerdo comercial. Los editores del periódico The Economist preguntaron a Trump si toda la fanfarronería era solo una táctica de negociación.
En entrevista, los editores cuestionaron: “Algunas personas piensan que esta es una estrategia de negociación, que dice cosas muy dramáticas, pero, de hecho, se conformaría con cambios muy ligeros. ¿Es eso correcto?”
La respuesta de Trump: "No, no lo es, no es una negociación. En verdad no lo es. No, ¿me conformaría con menos de lo que tengo? Sí, digo, ¿quién no lo haría?”
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Conformarse con menos, especialmente en el TLCAN, es difícilmente lo que había prometido a los trabajadores del llamado Cinturón de Óxido, quienes ponen su esperanza en que él regrese los empleos de manufactura con mejores acuerdos comerciales.
Trump ha admitido que esas promesas son una gran razón por la que es presidente hoy.
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"Creo que probablemente es una de las principales razones por las que estoy sentado aquí como presidente”, dijo Trump el 20 de abril.
Los comentarios de Trump a The Economist podrían reflejar una visión realista: el comercio es una pista de dos vías y las negociaciones con México y Canadá llevarán a concesiones de EU, también. Tiene sentido que Trump no obtenga todo lo que pide a menos que él dé algo a cambio.
Pero reconocer que se conformaría con menos contradice muchos de los principios centrales de sus promesas de campaña, lo que hizo salir a la gente a sus mítines y dio esperanza a millones.
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Trump ha amenazado con imponer aranceles a las importaciones de México o imponer impuestos a empresas que muevan sus operaciones a México (él ha reiterado esa amenaza esta semana contra Rexnord , que está cambiando trabajos a México de Indiana).
Trump ha sido rudo sobre el comercio en algunos aspectos. Salió de un acuerdo comercial que seguía en negociaciones, el Acuerdo Transpacífico, mejor conocido como TPP. Impuso un arancel de 20% a la madera canadiense. Inició una revisión de 100 días de las relaciones comerciales entre EU y China. Él también estuvo cerca de decir que “terminaría” con el TLCAN, después decidió que no después de hablar con sus contrapartes, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto y el Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau .
Pero el TLCAN fue uno de los objetivos principales de Trump durante su campaña. Y si bien sigue hablando fuerte y prometiendo un acuerdo más justo, a la vez que ofrece pocos detalles, ahora dice que está dispuesto a aceptar menos de lo que pide.
