Selfies, videollamadas y huellas dactilares, las nuevas armas de la banca
La selfie no será sólo útil para enaltecer el ego de los millennials, sino también servirá para que la banca frene los fraudes financieros como el robo de identidad.
Los bancos no le dirán hasta nunca a al Número de Identificación Personal (NIP), pero cada vez tendrá un mayor uso la huella dactilar, la identificación del rostro, voz -y en un futuro no muy lejano hasta el iris del ojo para abrir una cuenta, contratar un nuevo servicio o sacar dinero del cajero automático.
Los grandes bancos que concentran más de 80% de los activos, como BBVA Bancomer, Citibanamex y Banorte, entre otros, arrancaron pilotos o ya despliegan la tecnología para implementar herramientas que les permitan recabar datos biométricos de sus clientes. “ Es una medida muy relevante y positiva de cara al sistema financiero porque toma acción y obliga a todo el sistema a que pongamos medidas para proteger al usuario y a la banca, pero sobre todo evitar que México sea un país donde el fraude y la suplantación de identidad sea fácil de ejecutar”, dijo Eduardo Osuna, director general de Grupo Financiero BBVA Bancomer.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) exigirá por regulación que los bancos cotejen la identidad de sus clientes con la base de datos del Instituto Nacional Electoral (INE) y a través de huellas dactilares al contratar un crédito, de acuerdo con la propuesta enviada a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer). En un inicio, estos requisitos serán para nuevos créditos al consumo, pero las próximas fases podrían contemplar al préstamo automotriz, hipotecario y empresarial.
“Las entidades que calificamos ya se han venido preparando en estos últimos tiempos después de que salió este primer draft que pusieron en la Cofemer, para que pudieran utilizar estas opciones biométricas para contener sobre todo el robo de identidad”, comentó Veronica Chao, directora de instituciones financieras de la calificadora Fitch Ratings en México.
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BBVA Bancomer activará a finales de este año un lector de huellas dactilares en sus cajeros –algunos ya equipados con esta tecnología- para retirar efectivo. “Tenemos varios pilotos y algunos productos están ya con todos los biométricos y estaremos haciendo el despliegue durante el segundo semestre para tener biométricos en las sucursales, en todas las ventanillas y puntos de contacto”, explicó Eduardo Osuna.
Además de la huella dactilar, el banco prueba con reconocimiento de voz y facial para abrir cuentas de tarjetas, cheques y otros productos que puedan contratar en sucursales y vía remota desde una llamada telefónica o videollamada.
Otro ejemplo es Banorte, que fue pionero en el uso de reconocimiento facial por medio del teléfono inteligente para el uso de su aplicación. “Se está trabajando ya desde varios meses en incluir identificación biométrica como huellas dactilares y reconocimiento facial no sólo dentro sus procesos de sucursal, sino de todos los procesos móviles”, dijo Manuel Romo, director de medios de pago.
“Se trabaja de la mano con la autoridad y el gremio para que esta medida aproveche no sólo las bases que tienen el INE, sino que aproveche otras bases de dependencias de gobierno para que esto sirva para una verdadera cédula nacional de identificación”, agregó el directivo.
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Al menos BBVA Bancomer, Banorte y Citibanamex contemplaron la inversión para el uso de biométricos dentro de los planes ya trazados previamente para modernizar sucursales y cajeros, sin embargo los directivos no precisaron el dinero destinado a la aplicación de estas nuevas herramientas biométricas.
La clave de los biométricos
Tanto las huellas dactilares como el iris son los elementos más usados y aceptados para corroborar la identidad de una persona, explicó Adolfo Loera, director general de Biometría Aplicada. “La biometría de voz o rostro u otras para asegurar la identidad tienen que estar ligadas a estas dos”, puntualizó.
En el primer trimestre del año se registraron más de 1.5 millones de quejas por fraudes bancarios , un alza de 10% frente al mismo periodo de 2016. Los casos de robo de identidad aumentaron 18%, al pasar de 16,085 a 19,004 en el mismo periodo.
Uno de los puntos clave para asegurar la identidad de los usuarios de la banca en este nuevo proceso que proponen la autoridades para la banca, es contar con una mejor metodología que permita corroborar la identidad de las personas.
“Cuando construyes bases biométricas y comparas la huellas, puedes asegurar que este cliente no está registrado con distintos nombres y es cuando generas esta unicidad. Es crucial el momento en que empadronas a un cliente y tienes que poner una serie de metodologías (...) no sólo es integrar los lectores de huella digital”, explicó Adolfo Loera.
Por el momento, el regulador plantea como manera de autenticación biométrica el uso de las 10 huellas dactilares de la mano de los usuarios de la banca, pero las empresas podrán pedir otro tipo de biométricos para garantizar la identidad del cuentahabiente.
"A mayores biometrías vinculadas, tendremos mayor autenticación segura por varias plataformas", agregó.