Slim no se conforma con la nueva tarifa de interconexión y busca cobrar más
El enfrentamiento de Telcel, de América Móvil, con el regulador de telecomunicaciones, el IFT, por las tarifas de interconexión en telefonía —lo que una empresa cobra a otra cuando una llamada de sus clientes termina en sus redes— no ha terminado.
La empresa de Carlos Slim logró en agosto que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) anulara la llamada tarifa cero, que hacía que los competidores no le pagaran nada por la interconexión, en una medida con la que se pretendía impulsar la competencia en telecomunicaciones, donde América Móvil, un ex monopolio, mantiene cerca de dos tercios de los clientes.
El 2 de noviembre, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), determinó la nueva tarifa: Telcel puede cobrar 0.028562 pesos por minuto de interconexión a su red, y pagará 0.112799 pesos a su competencia por terminación de llamadas.
Esta diferencia de tarifas busca mantener el impulso a la competencia, pero Slim sigue sin estar conforme. Por ello, la empresa busca impugnar ante la justicia para “que se le compense de los daños y perjuicios ocasionados por dichos subsidios (la tarifa cero)”, dijo en un comunicado.
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“Ni la empresa tiene claro qué acciones (jurídicas) va a realizar (…). Esta es la primera vez que se va a litigar un asunto tan complejo después de la reforma, puede ser desde el punto de vista mercantil o amparo”, dijo Jorge Negrete, presidente ejecutivo de Mediatelecom.
Sin embargo, la empresa de Carlos Slim ya no puede aspirar a recuperar los montos por interconexión que estuvo sin cobrar desde agosto de 2014 hasta el término de este año. “La resolución de la Corte sobre este tema en particular es definitiva, jurídicamente se llama cosa juzgada. No es posible ya modificar este tema”, dijo Pedro Arias, del despacho Arias, Meurinne y Rodríguez.
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Pero eso no frena el interés de la empresa por conseguir mejores tarifas de interconexión para el próximo año, pues “analiza los medios de impugnación a su alcance para continuar su defensa frente a subsidios regulatorios injustificados”, según el comunicado.
“(Telcel) puede promover un amparo en contra de las nuevas tarifas determinadas por el IFT —vigentes a partir del 2018—, pero es muy difícil que lo logre”, opinó Arias.
La empresa declinó hacer comentarios acerca de sus planes en este sentido.