OPINIÓN: Trump haría bien en promulgar la ley que contempla sanciones a Rusia
Nota del editor: Julian Zelizer es profesor de Historia y Asuntos Públicos en la Universidad de Princeton, además de miembro numerario de New America. Escribió los libros Jimmy Carter y The Fierce Urgency of Now: Lyndon Johnson, Congress, and the Battle for the Great Society. También es conductor del podcast Politics & Polls. Síguelo en su cuenta de Twitter @julianzelizer . Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.
(CNN) – A menos que algo salga terriblemente mal, el Congreso estadounidense está a punto de enviarle a Donald Trump una ley importante con la que se imponen duras sanciones a Rusia por haber interferido en las elecciones de 2016, por sus constantes violaciones a los derechos humanos, por su anexión de Crimea y por sus operaciones militares en el este de Ucrania.
El Congreso republicano sorprendió con su reacción a Trump al incluir disposiciones que limitan las facultades del presidente para levantar las sanciones por su cuenta. En la propuesta también se imponen sanciones a Corea del Norte y a Irán. De cierta forma y en lo que respecta a Rusia, muchos republicanos están dando a entender, a través de la propuesta de ley, que ya están hartos del idilio entre Trump y Vladimir Putin.
OPINIÓN: ¿Qué pasó realmente entre Trump y Rusia?
La presidencia ha dado señales contradictorias sobre lo que Trump pretende hacer si el Congreso le envía la propuesta de ley esta semana, pero parece que bien podría promulgarla. "La presidencia apoya una postura firme respecto a Rusia, particularmente la implementación de estas sanciones. La propuesta de ley original estaba mal redactada, pero pudimos trabajar con la Cámara de Representantes y con el Senado; la presidencia está satisfecha de haber podido hacerlo y de hacer los cambios necesarios, así que respaldamos las condiciones actuales de la ley", dijo Sarah Huckabee Sanders , secretaria de Prensa de la Casa Blanca.
En vista de que la propuesta de ley cuenta con un apoyo abrumador, tanto en la Asamblea como en el Senado, cualquier veto presidencial probablemente se anularía.
Claro que ese mismo día, al más puro estilo trumpiano, el nuevo director de Comunicaciones de la presidencia, Anthony Scaramucci, manifestó sus dudas sobre los reportes de los servicios de inteligencia estadounidenses sobre la intervención de Rusia en las elecciones. "Hay mucha desinformación allá afuera", le dijo a Jake Tapper, de CNN, citando a una fuente anónima que le contó que si los rusos lo hubieran hecho, nunca habría pruebas. Pronto reconoció que esa fuente era Donald Trump.
Trump entró al quite y tuiteó el domingo : "Conforme continúa la fraudulenta cacería de brujas sobre Rusia, dos grupos se están riendo de que esta excusa sobre haber perdido las elecciones esté cobrando fuerza: ¡los demócratas y los rusos!".
Un nuevo enfoque respecto al 'fraude electoral'
Las señales contradictorias de Trump son muy sorprendentes si pensamos en que el presidente de Estados Unidos ha abordado otro tema relacionado con las elecciones: el fraude electoral. A diferencia de la intervención de Rusia, la abrumadora mayoría de los expertos coincide en que Estados Unidos no tiene problemas de fraude electoral .
OPINIÓN: ¿Trump se divierte en la presidencia de EU?
En casi todos los estudios de importancia sobre el tema se han buscado, sin éxito, pruebas de la existencia de una cantidad considerable de boletas de personas que no tienen derecho a votar. Por ejemplo: el Brennan Center informó que las tasas de fraude electoral, que en su mayoría fueron consecuencia de errores administrativos y de malas técnicas de comparación de datos, fueron del 0.00003 y del 0.00025%, respectivamente. En 2014, El Washington Post encontró únicamente 31 casos creíbles de fraude electoral en 1,000 millones de boletas emitidas a lo largo de 14 años (entre el 2000 y 2014).
De hecho, en su libro Give Us the Ballot, Ari Berman demostró que desde hace décadas, las afirmaciones de fraude electoral se han usado como justificación política para implementar restricciones al voto que suelen acotar los derechos de grupos que suelen votar a favor de los demócratas.
A pesar de las pruebas, Donald Trump ha aprovechado su condición de abusón para hablar del problema del fraude electoral desde que asumió la presidencia e incluso llegó a hacer la afirmación descabellada de que el fraude electoral fue la única razón por la que perdió por un margen tan amplio en el voto popular.
OPINIÓN: ¿Jared Kushner merece autorización de acceso de seguridad?
"Además de haber arrasado en el Colegio Electoral, gané el voto popular si restas a los millones de personas que votaron ilegalmente", tuiteó el 27 de noviembre. En realidad, perdió el voto popular ante Hillary Clinton por más de 2.8 millones de votos . Ha afirmado falsamente que hubo fraude electoral, una y otra vez y con toda certeza.
Lo más importante es que implementó una Comisión Presidencial para la Integridad de las Elecciones, cuyo vicepresidente es Kris Kobach, uno de los principales promotores de las leyes que restringen el derecho al voto. Esta comisión bien podría recomendar que se implementen medidas más restrictivas.
Hablando de noticias falsas, en 1965 , el entonces presidente Lyndon Johnson promulgó una ley que garantizaba que el gobierno federal protegería el derecho al voto de todos los estadounidenses. Hoy tenemos un presidente que parece estar decidido a usar el poder del gobierno federal para avanzar en la dirección contraria ahora que la Suprema Corte limitó considerablemente la implementación de la Ley sobre el derecho al voto .
Rusia trata de socavar la democracia
En el tema de Rusia, la preponderancia de las pruebas de parte de agencias investigadoras clave, de legisladores de ambos partidos políticos y de expertos en elecciones confirma que los rusos intervinieron en las elecciones estadounidenses a través de una campaña masiva de desinformación y del robo de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata a través del hackeo. "No hay disentimiento", dijo Dan Coats, Director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos.
OPINIÓN: La reunión con Trump Jr., parte de la estrategia de Putin
Tanto en ese país como en Francia y Alemania, los rusos están "tratando de socavar la democracia occidental", dijo en un foro de seguridad que se celebró en Aspen .
Sin embargo, Donald Trump y muchos de sus asesores se niegan a reconocer lo que sabemos. Trump sigue un patrón desconcertante de negarse a ser fuerte, decidido y constante al hablar de lo ocurrido y, lo más importante, a avanzar con alguna clase de recomendación política para impedir que esto vuelva a ocurrir. ¡Su mayor iniciativa hasta la fecha fue la propuesta de establecer un programa conjunto de seguridad cibernética con los mismos rusos, idea que desechó rápidamente!
Es como si los dueños de un banco les pidieran a quienes les robaron que trabajen como sus guardias de ahora en adelante.
nullKellyanne Conway, asesora de Trump, le dijo a Brian Stelter , de CNN, que la intervención de Rusia en las elecciones "no es una noticia importante" y acusó a "los medios de comunicación tradicionales" de hacer "una cobertura desproporcionada, descabellada y desigual respecto a Rusia cuando no hay nada allí".
Hasta ahora, es innegable que Donald Trump ha sido "suave" al lidiar con Putin. Se ha parado de cabeza para tratarlo como uno de los personajes más importantes del escenario mundial y ha excluido a muchos de sus aliados del G-20, se ha negado a adoptar una postura firme respecto a lo que sus propios funcionarios de los servicios de inteligencia dicen que Rusia hizo en 2016 y está pensando en hacerlo de nuevo.
Aunque no se habla tanto de ello, Trump ha hablado poco de las anexiones de territorio y de los abusos a los derechos humanos en Rusia.
OPINIÓN: ¿Por qué Trump nunca será un gran líder?
La propuesta de ley que el Congreso está a punto de enviarle a Trump es la primera oportunidad real que tiene de demostrar que entiende las amenazas a las que nos enfrentamos y que como comandante en jefe, es necesario que proteja la integridad de nuestro sistema electoral.
La presidencia está tratando de convencer al Congreso y a la opinión pública de que no hubo colusión con los rusos. Este fue el núcleo del discurso que Jared Kushner , asesor y yerno de Trump, dio a la opinión pública y a las comisiones de Inteligencia. "Permítanme ser muy claro: no me coludí con Rusia".
Dijo que la victoria de Trump no fue consecuencia de la interferencia de los rusos. "Donald Trump tenía una plataforma mejor e hizo una campaña más inteligente y por eso ganó. Insinuar otra cosa pone en ridículo a quienes votaron por él".
OPINIÓN: Donald, el hijo que no quería ser un Trump
Las palabras de Kushner y de otros miembros del equipo de Trump no convencen a muchos estadounidenses que no apoyan a Trump por las contradicciones y la desinformación provenientes de la presidencia.
Si Trump de verdad quiere hacer un pronunciamiento firme respecto a Rusia, la propuesta de ley de sanciones es su mejor oportunidad. En vez de concentrarse en una epidemia inexistente de fraudes electorales, Trump debería dejar en claro que la interferencia de Rusia es una fuente clave de inestabilidad mundial y no se debe tolerar en nuestras elecciones.
Trump debería promulgar esta propuesta de sanciones (sin promulgar disposiciones adicionales que socaven el proyecto) y dejar en claro que está asumiendo una postura fuerte ante Rusia.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión