Los partidos difieren sobre qué hacer con el dinero que den a la reconstrucción
El PRI, Morena y el frente PAN-PRD-Movimiento Ciudadano presentaron sus propuestas sobre qué destino dar a los recursos que los partidos cedan para ayudar a las personas damnificadas por los recientes sismos.
En tanto que los priistas formalizaron este martes su iniciativa para renunciar al financiamiento público para ponerlo a disposición del gobierno federal en las tareas de reconstrucción, la oposición se pronunció por enviar los recursos a ‘bolsas’ independientes: Morena a un fideicomiso administrado por personalidades vinculadas al mismo partido, y el Frente Ciudadano por México, a un fondo supervisado por ciudadanos.
Los dirigentes de los partidos que integran el frente manifestaron su desconfianza en entregar las prerrogativas presupuestadas para los institutos políticos al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, militante del PRI.
“Sería absolutamente inaceptable que políticos corruptos , como ya ha ocurrido en nuestro país, se robaran estos recursos, que son de la gente, de los ciudadanos. Por eso no estamos de acuerdo en que los retenga el gobierno federal”, afirmó el líder nacional del PAN, Ricardo Anaya, en conferencia de prensa en la Cámara de Diputados, acompañado por sus homólogos del frente.
La dirigente del PRD, Alejandra Barrales, abundó que su proyecto también difiere del fideicomiso anunciado por Morena , que será supervisado por escritores, periodistas y líderes como el sacerdote Alejandro Solalinde.
“Nosotros no tenemos confianza en ese gobierno, al igual que muchos ciudadanos. Lo que proponemos es la creación de un Fondo Especial para la Reconstrucción Nacional , que tenga una auditoría, una contraloría ciudadana permanente. Fuera de simulación, tampoco se trata de proponer nuestro propio fondo con nuestros propios compañeros auditándolo. Se trata de ser serios”, afirmó.
Los líderes aliados agregaron que los recursos a los que los partidos pueden ceder serán insuficientes para las labores, por lo que llamaron al gobierno federal a sumarse con ahorros por hasta 60,000 millones de pesos.
El coordinador de los diputados de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, detalló que su propuesta es limitar la publicidad gubernamental —que cifró en 36,000 millones de pesos gastados durante este sexenio—, eliminar los seguros de gastos médicos, despedir hasta a 50% del personal contratado por honorarios, una reducción a la mitad de los puestos de jefes de departamento y subsecretarías, así como recortar las oficinas alternas y los gastos en telefonía celular, gasolina, viáticos y vehículos.
El presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, detalló por su parte un plan de austeridad que contempla economías por 300,000 millones de pesos con acciones como la supresión de las pensiones para los expresidentes, la venta de toda la flotilla de aviones o sustituir la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México por la de dos pistas en el Aeropuerto Militar de Santa Lucía.
López Obrador detalló que su proyecto es destinar 60,000 millones de pesos a vivienda, 20,000 a infraestructura carretera, 10,000 a patrimonio histórico, 50,000 a infraestructura educativa , 25,000 a infraestructura de salud, 30,000 a infraestructura básica, 30,000 a hidráulica, 45,000 a apoyo para damnificados, 15,000 a prevención de desastres y 15,000 a reactivación económica.
El líder de Morena concretó la apertura del fideicomiso que había adelantado para distribuir los 103 millones de pesos que este partido aportará para los afectados de los sismos.
López Obrador difundió un video en el que insistió en que los fondos serán vigilados por intelectuales y líderes sociales como Solalinde, Elena Poniatowska, Laura Esquivel, Julio Scherer Ibarra, Jesusa Rodríguez, Pedro Miguel, Bertha Maldonado y Paco Ignacio Taibo II, quienes se han mantenido cercanos a las causas que defiende su partido.
El coordinador de los diputados del PRI, César Camacho, presentó este martes en el pleno de la Cámara baja su paquete de iniciativas que plantea eliminar el financiamiento público para los partidos políticos y a los legisladores plurinominales, con lo cual estiman que se podrían ahorrar casi 20,000 millones de pesos para destinarlos a los damnificados.