¿Por qué le ha ido bien a las acciones de Tesla? Musk puede agradecer a Trump
Puede que Elon Musk y el presidente Donald Trump no concuerden en todo. Pero la disposición de Musk de continuar reuniéndose y asesorando a Trump, a pesar de que muchos otros líderes tecnológicos se enfrentan a las críticas por hacerlo , de hecho, podría ser una decisión comercial inteligente.
Las acciones de la empresa de autos eléctricos Tesla han aumentado más de 25% en lo que va del 2017. Las acciones no están lejos de su más alto nivel, el cual alcanzó en septiembre de 2014.
Y esto a pesar del hecho de que muchos inversionistas siguen preocupados sobre si Tesla llegará demasiado tarde al mercado con su auto más accesible, el Modelo 3. GM ha vencido a Tesla con su nuevo Bolt. También existe el Leaf de Nissan.
nullAdemás, algunos inversionistas están nerviosos por el plan de Tesla de adquirir a SolarCity , una decisión que lo convertiría en un jugador aún mayor en la energía alternativa, pero es muy distinto a producir y vender autos. Tampoco ayuda que SolarCity es dirigida por dos de los primos de Musk. Él también es presidente. Así que es entendible por qué los críticos podrían estar preocupados por el nepotismo y el interés propio.
Así que, ¿por qué le ha ido tan bien a las acciones? Musk puede agradecer a Trump por ello.
Si las políticas del nuevo presidente de hecho impulsan la economía (y debilitan al dólar, lo cual impulsa al petróleo), entonces también habrá una mayor demanda de autos eléctricos.
Para muchos consumidores promedio, es decir, para los que no cuentan con suficiente riqueza para adquirir un Model S, o un Model X, pero podrían adquirir un Model 3 , la decisión de rechazar los coches devoradores de gasolina a favor de un auto que se conecta dependerá de los precios del petróleo.
Si llenar el tanque se vuelve demasiado costoso, entonces un vehículo eléctrico será la decisión económica más inteligente.
Con eso en mente, la voluntad de Musk de relacionarse con Trump parece tener más sentido. También ayuda que Musk puede pregonar a Trump que él ha creado muchos empleos para estadounidenses con la nueva fábrica de la empresa en Nevada.
La principal fábrica de manufactura de Tesla se encuentra en Fremont, California. No en México, China, Japón o alguno de los otros lugares fuera de EU que Trump ha estado amenazando con tarifas y otras amenazas comerciales.
Así que, en muchos aspectos, Tesla podría ser considerada por Trump (y Wall Street) como una empresa todavía más estadounidense que las Grandes Tres de Detroit.
Trump ya ha tenido disputas con GM y Ford por Twitter por los autos que fabrican en México. Y Fiat Chrysler ahora es técnicamente una empresa europea.
Por supuesto, Musk no concuerda con Trump sobre muchas cosas. Tanto Tesla como SpaceX se unieron a más de 100 otras empresas de tecnología que firmaron un documento legal en el que se oponen a la orden ejecutiva de Trump que prohíbe la entrada de inmigrantes provenientes de siete naciones de mayoría musulmana.
Musk tampoco concuerda con algunas de las afirmaciones de Trump sobre que el cambio global podría no ser cierto.
Pero ha defendido su decisión de continuar sus reuniones con el presidente, argumentando que la única manera enque posiblemente pueda cambiar la opinión de Trump sería si de hecho puede dialogar con él.
En otras palabras, parece que Musk quiere estar, para citar al musical menos favorito de Trump, “Hamilton”, en donde sucede la acción. Y los inversionistas parecen estar bastante satisfechos de que Musk esté ahí también.
