Ella está detrás de la estrategia para que Coca-Cola sea más que un refresco
Andrea Pereira levantó la mano. No esperó a que sus jefes le ofrecieran la vicepresidencia de Bebidas Emergentes de Coca-Cola de México. Diseñó un plan de carrera, trabajó en él, habló con sus mentores y, a principios de 2016, puso su propuesta sobre la mesa: quería continuar su desarrollo desde una nueva posición en la empresa.
El cargo que Pereira –entonces directora para la región sur en México– deseaba ocupar no estaba vacante, pero pronto las piezas del tablero se reacomodaron y la posición se liberó. Para ocuparla, la brasileña debía competir con tres candidatos.
Fueron 40 días de entrevistas para detallar los conocimientos que había adquirido en los 24 años de experiencia en áreas de marketing y operaciones en la compañía, donde diseñó el plan de crecimiento de Centroamérica e incorporó al portafolio la empresa lechera Estrella Azul.
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También contó sus motivaciones para ser vicepresidenta del área responsable de las estrategias para Ciel, Jugos del Valle, Fuze Tea, Powerade, Santa Clara y Ades, que se integró al Sistema Coca-Cola en América Latina en marzo de 2017. “Quería expandir mis alas al mundo de las nuevas bebidas”, dice Pereira, cuyo objetivo era innovar y consolidar el negocio de no gaseosas.
Y lo dejó claro en las entrevistas, pues asumió el cargo en mayo de 2016. Su labor debía centrarse en seguir expandiendo las categorías, construir un plan de crecimiento que incluyera a toda la Industria Mexicana de Coca-Cola –las ocho embotelladoras, Jugos del Valle y Santa Clara– y lograr que los consumidores pensaran en la compañía como algo más que un refresco. “La gente ya empieza a identificar que la empresa no nada más es Coca-Cola”, dice José Cebeira, analista de Actinver.
En los últimos meses, el portafolio de bebidas emergentes no ha sumado integrantes. La estrategia está en desarrollar sus propias marcas. En 2017, la compañía transformó la imagen de Fuze Tea y apostó por una versión con menos calorías, también lanzó Barista Bros Café, una marca que ya tenía en Australia.
La ejecutiva, que también es presidenta del consejo de accionistas de Jugos del Valle y miembro del board del segundo embotellador de Coca-Cola en Brasil, Solar, asegura que las dos marcas de su portafolio que más crecimiento registran desde su llegada son Jugos del Valle y Santa Clara, con 39.5 y 2.8% de participación en los mercados de jugos y leches en 2017, según Euromonitor.
Ideas claras
Para Pereira, los planes de carrera no sólo deben contener los puestos y las actividades a las que se aspiran, también tienen que incluir las labores que no se desean. En su caso, los empleos con rutinas establecidas y burocráticas. “Soy una persona de aprender e innovar”.
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Alfredo Rivera, presidente de Coca-Cola Latinoamérica, identifica a Pereira como un agente de cambio, capaz de escuchar y modificar su punto de vista. “No se da por vencida”, destaca el ejecutivo.
En 2016, enfrentó su decisión más difícil: la categoría de Santa Clara registraba escasez de producto porque el procesamiento de lácteos sigue un tratamiento casi imposible de acelerar. Tuvo que detener el plan de expansión que había definido. “Fue una decisión para ser fiel a las cosas correctas”.
Hoy, dice, fue una buena elección: recuperó el crecimiento y el porcentaje de población que conoce Santa Clara pasó de 2% en 2012 a 25% en 2017. “Mi gran logro es crecer un negocio ya exitoso”, concluye. “A veces nos falta levantar la mano y decir qué queremos. Yo quise muchísimo este puesto y lo pedí”.