La cuarentena hizo a los directivos más humanos

En la muestra, realizada entre 347 personas distribuidas en niveles directivos, mandos operativos y miembros del consejos de administración en México, reveló que la resiliencia fue la segunda competencia de la que mayor aprendizaje se tuvo, con el 81% de coincidencia entre los participantes. Mientras que la flexibilidad quedó en tercer lugar, con el 80%.

El home office también fortaleció las relaciones familiares, según coinciden los encuestados. El 59% de ellos comentó que estar en casa los hizo aprovechar mayor tiempo con su pareja o familia; el 42% incluso pudo hacer división de tiempo entre la convivencia personal con los tiempos de trabajo.

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"La gente ha podido manejar la capacidad de concentrarse, de enfocarse en resultados, aunque ha sido más complejo el tema de manejar el tiempo destinado para el trabajo y la familia, pues se ha tenido que convivir con la educación con los hijos o las labores en casa", dijo Yvette Mucharraz y Cano, directora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD).

Respecto al apoyo emocional y de liderazgo que expresaron los encuestados, el 81% consideró que su jefe les da la confianza y libertad para organizar sus métodos de trabajo y de adaptación a la "nueva normalidad" y el 86% dijo sentirse apoyado y cercano con sus compañeros.

Aún cuando no existía una preparación óptima para ejercer el home office, el 84% de encuestados se ha sentido cómodo trabajando desde lejos, pues cuenta con los requerimientos necesarios. Incluso el 66% continuaría trabajando en esta modalidad cuando la contingencia sanitaria pase siempre y cuando su empleador continúe suministrando las herramientas básicas.