Anteriormente, el magnate se había pronunciado a favor de las jornadas reducidas de trabajo. Apenas un mes antes, durante la XXVIII Reunión del Plenario de la Fundación Círculo Montevideo en Avilés, Asturias, España, el empresario mexicano había expresado su interés en explorar un equilibrio entre la vida laboral y personal a través de una semana laboral más corta. No obstante su propuesta difiere de la hecha por el Gobierno federal.
El empresario habló entonces de una jornada laboral de 36 horas semanales distribuidas en tres días, con jornadas diarias de 12 horas. Esta propuesta, según Slim, podría lograrse gracias a la tecnología disponible para las empresas modernas, incluyendo la inteligencia artificial y otras innovaciones que permitirían aumentar la productividad.
Al respecto, el director de Experis México, Caribe y Centroamérica, Carlos Bueso, enfatizó abordar la inteligencia artificial (IA) como un facilitador de tareas que requiere la intervención humana. Bueso subraya la necesidad de que las personas adquieran habilidades humanas para adaptarse de manera ágil a los cambios tecnológicos que se están experimentando en el entorno laboral.
En consonancia con esta perspectiva, Experis México proyecta que para el año 2025, aproximadamente el 50% de todos los empleados necesitará capacitación personalizada a medida que la adopción de tecnología continúe en aumento. Este enfoque busca asegurar que los trabajadores estén equipados con las habilidades necesarias para aprovechar al máximo las herramientas tecnológicas emergentes.
Jornada laboral vs productividad
La productividad es la eficiencia con la que se utilizan los recursos para generar resultados. En el ámbito laboral, la productividad se mide en términos de la cantidad de producción o servicios generados por cada unidad de trabajo, tiempo o capital invertido. Mejorar la productividad implica utilizar los recursos disponibles de manera más eficiente para aumentar la producción, pero no los costos.
La productividad laboral no necesariamente está relacionada con la cantidad de horas destinadas al trabajo. Entre los factores que pueden influir en la productividad está la calidad de la gestión, la capacitación de los trabajadores, la tecnología utilizada, la eficiencia de los procesos y la motivación del personal.
Beatriz Robles, directora de Operaciones y Cuentas Clave de Manpower, señala que reducir la jornada laboral podría mejorar la salud física y mental de los empleados. Asimismo, plantea la posibilidad de que la medida sirva como incentivo para que los trabajadores aumenten su compromiso con la empresa, lo que se traduce en un impacto positivo en su productividad.
Robles también subraya la importancia de observar cómo se adaptan los trabajadores a este nuevo esquema laboral y cómo utilizan su tiempo libre, ya sea para descansar o para involucrarse en otras actividades.
Por otro lado, Alejandra Massud, socia de GLZ Abogados y especialista en derecho laboral, considera que reducir la joranda traería beneficios en la salud mental de los empleados, al proporcionarles un mejor equilibrio entre su vida laboral y personal. La abogada argumenta que este equilibrio es crucial, ya que empleados satisfechos desde un punto de vista personal tienden a estar más comprometidos con su trabajo y a mostrar mejores resultados en términos de productividad, lo que se traduce en mejores ganancias.
En su nuevo estudio de Remuneración 2023-2024, la firma de reclutamiento especializado PageGroup, identificó que el 90% de los colaboradores considera que sería más feliz y tendría un mejor equilibrio en su vida con una semana laboral más corta. Además, el 68% cree que esto podría aumentar su productividad.
¿Trabajar menos implica ganar menos?
En algunas empresas se ha planteado la posible vinculación entre la reducción de la jornada y una disminución salarial. Incluso, ante la dicotomía entre trabajar más o ganar menos, Slim destacó su preferencia por la primera opción: "¿Qué es mejor, ganar mucho más y vivir mejor, o trabajar menos y ganar menos? Yo creo que es mejor trabajar más y ganar más", reiteró.
Actualmente la Ley Federal del Trabajo indica que los empleadores no pueden bajar el sueldo de sus trabajadores, y la reforma que se discute actualmente en la Cámara de Diputados habla sobre reducir la jornada laboral, mas no el salario.
"La reducción de horas laborables, en principio, no implicaría una disminución del sueldo, ya que la iniciativa propone que se trabaje menos por el mismo salario", dice Patricia Pérez Solernou, docente de la Escuela Bancaria y Comercial. Sin embargo, Massud advierte que, en caso de aprobarse, los empleadores podrían buscar modificar el salario de nuevos ingresos o categorías, en función de las horas laboradas, independientemente de si la productividad se mantiene constante o incluso aumenta.
Héctor Márquez, presidente de la comisión de Capital Humano y Seguridad Social de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), enfatiza que la intención no es reducir salarios ni despedir a los trabajadores, sino mantener la productividad y los beneficios para los empleados. En este contexto, señala que "bajar salarios o despedir gente por esta reforma realmente sería un castigo".