El regulador de competencia castiga a niponas con 72 mdp por prácticas indebidas
El regulador de competencia en México multó con 72 millones de pesos (mdp) en total a las empresas japonesas Mitsubishi Heavy Industries (MHI) y Denso Corporation (Denso) por prácticas monopólicas que afectaron los precios de los compresores para aire acondicionado de vehículos.
“La Comisión sancionó a las dos compañías japonesas por haber manipulado el precio de estos componentes para automóviles”, anunció este lunes la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) en un comunicado.
El regulador explicó que las empresas intercambiarion información comercial sensible con el objetivo de manipular el precio de comprensores de aire vendidos a General Motors mediante un concurso privado organizado por la automotriz.
“MHI y Denso, en lugar de participar de manera independiente como competidores, realizaron diversas reuniones donde intercambiaron información comercial con el objeto y efecto de manipular el precio al que serían ofrecidos los compresores, mismos que fueron adquiridos por GM sin saber que estaba pagando un sobreprecio”, expuso la Cofece como parte de la investigación IO-001-2013.
Debido a estas prácticas, General Motors pagó 18 millones de pesos al adquirir los componentes ofrecidos por las firmas japonesas vendidos con un sobreprecio.
“Sin embargo, el daño al proceso de competencia es más amplio”, advirtió la Cofece.
El regulador multó con 36.17 mdp a cada una de las firmas tras resolver que hay elementos para acreditar la responsabilidad de ambas en el intercambio de datos para manipular precios.
La Cofece destacó que por primera vez el pleno ordenó retirar los beneficios de su Programa de Inmunidad a un solicitante, ya que éste suspendió su cooperación con la comisión.
La historia
La Cofece explicó que las prácticas por las que sancionó a MHI y Denso fueron realizadas por un cártel internacional cuyo objetivo, además de obtener más ganancias por cada pieza vendida a GM, era mantener precios elevados de los compresores a nivel mundial.
“En el caso de nuestro país, las prácticas colusorias dañaron el mercado pues los compresores adquiridos fueron importados y empleados como insumos por General Motors México (GM México) para ensamblarlos en automóviles que se fabrican y comercializan en el territorio nacional”, indicó la Cofece.
La afectación comprende el lapso de 2012 a 2017, pues es lo que dura el contrato entre las multadas y GM, aunque la investigación del regulador considera el periodo del primero de noviembre de 2012 al 31 de mayo de este año.
El cártel fue indagada previamente en Estados Unidos tras lo cual MHI firmó un acuerdo de culpabilidad antes autoridades de competencia en ese país en el que reconoció la venta de los componentes a GM a través de licitaciones manipuladas de 2001 a 2010.