Los arándanos y el whisky, el punto débil de EU que China busca aprovechar
Cuando la Unión Europea (UE) intentó a principios de este año evitar los aranceles de Estados Unidos, sus líderes amenazaron con devolver el golpe a los productos del país norteamericano, incluidos los arándanos, el jugo de naranja, el whisky y el tabaco.
Los mismos cuatro productos (arándanos, jugo de naranja, whisky y tabaco) fueron incluidos en una lista de 106 productos a los que China planea aplicar nuevas tarifas como parte de su creciente disputa comercial con Estados Unidos.
¿Qué tienen de especial los arándanos y el whisky?
Los expertos dicen que el conjunto aparentemente aleatorio de productos de Estados Unidos en línea para represalias, de hecho, se seleccionó cuidadosamente. El objetivo es aumentar la presión económica y política sobre los políticos en Washington y convencerlos de cambiar el rumbo.
"Todo el mundo lo ve muy científicamente, y tienen mucha ciencia política en esto", dijo Ross Denton, socio y especialista en comercio de la firma de abogados Baker McKenzie.
Él dijo que la Unión Europea fue pionera en el sistema moderno de represalia comercial, mediante el cual los funcionarios identifican los productos que tienen la mayor importancia económica para un país objetivo y luego "hacen una referencia cruzada con el lugar donde creen que se causará el mayor dolor político".
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El ejercicio arroja una amplia lista de objetivos potenciales, que se reduce considerando el impacto económico que las tarifas tendrían sobre los consumidores locales.
"Definitivamente exploran el impacto en el consumidor", dijo Denton. "Siempre intentan asegurarse de que haya un suministro alternativo para [sus] consumidores".
Lo que nos lleva de vuelta a los arándanos y el whisky.
Wisconsin, un estado dinámico que votó por el presidente Donald Trump en 2016, produce más de la mitad de los arándanos del mundo. También es el estado natal de Paul Ryan, el principal republicano en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos.
China importa arándanos estadounidenses por un valor de 50 millones de dólares anuales, o el 15% de las exportaciones mundiales de Estados Unidos, según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos. La Unión Europea importa 130 millones de dólares en arándanos, o el 38% de las exportaciones estadounidenses.
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Beijing y Bruselas saben que la amenaza pública de aranceles de represalia ejerce presión política sobre Ryan y otros republicanos en Wisconsin. Incluso pueden presionar a la administración de Trump para que invierta el rumbo.
Mientras tanto, si los consumidores chinos y europeos tuvieran que pagar más por los arándanos, o renunciar a ellos por completo, el dolor no sería tan severo.
"Los socios comerciales están tratando de entender cómo influir en el presidente Trump", dijo Chad Bown, investigador principal del Peterson Institute for International Economics."Realmente no hay un historial probado definitivo que creemos que podría 'funcionar'. "
El líder mayoritario del Senado, Mitch McConnell, otro influyente republicano, proviene de Kentucky, donde la sexta exportación más grande es el whisky y el 63% de los votantes eligieron a Trump.
Un arancel sobre el whisky podría perjudicar gravemente a los productores estadounidenses. Pero los consumidores en China y la Unión Europea tienen muchas alternativas: pueden obtener whisky premium de Irlanda, Escocia o Japón sin demasiados problemas.
Bown dijo que el objetivo final es presionar a múltiples republicanos con la esperanza de que algunos de ellos puedan influir en Trump.
"El presidente Trump es un tipo muy diferente de presidente. Realmente no está claro ... a quién escucha para obtener consejos sobre políticas ", dijo.
Después de semanas de cabildeo, la Unión Europea pudo obtener una exención temporal a los aranceles que la administración Trump asignó a productos de acero y aluminio. Esto significa que los arándanos y el whisky se han salvado, por ahora.
Pero las tensiones comerciales con China no muestran signos de ceder.
Beijing anunció su lista de 106 productos estadounidenses que recibirán el 25% de los aranceles el miércoles. El jueves, Trump dijo que estaba considerando nuevas tarifas sobre otros 100,000 millones de dólares en productos chinos .
Mark Muro, miembro senior de Brookings Institution, estima que aproximadamente 2.1 millones de empleos en Estados Unidos podrían verse afectados por los aranceles de represalia que China ha anunciado hasta ahora.