La euforia puede contagiar a la economía si 'les bleus’ ganan el Mundial
Una victoria de Francia en la final del Mundial de Rusia el próximo domingo ante Croacia tendrá un impacto positivo para la economía del país, según el gabinete Euler Hermes, que cifra en una décima el crecimiento suplementario del Producto Interior Bruto (PIB).
Según este gabinete de estudios, la confianza de los franceses se verá fortalecida en 5 puntos si su selección se lleva el trofeo, lo que se traducirá en dos décimas de mejora del consumo y en 2,000 millones de euros de riqueza nacional adicional, el equivalente a una décima de PIB.
Para llegar a esa conclusión, Euler Hermes ha analizado el impacto económico de los grandes eventos deportivos de los últimos 15 años para los países que han triunfado, en particular sobre la confianza de los consumidores.
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Por ejemplo, la victoria de España en el Mundial de 2010 le reportó media décima al PIB, según sus cálculos, mientras que la de la Eurocopa de 2012, cuando el país ya había comenzado a superar la crisis económica, fue de una décima.
Entre los fenómenos directos que se observan en este tipo de situaciones, destaca un mayor consumo en los bares, así como el incremento de las ventas de televisores y de productos deportivos de la selección.
La empresa Doublet multiplicó por 40 las ventas de banderas de Francia cuando les bleus de Didier Deschamps superaron a Argentina en octavos de final el pasado 30 de junio.
"Es dinero que los particulares hubieran ahorrado en otras circunstancias y Francia tiene un exceso de ahorro", indicó el responsable de estudios del gabinete, Ludovic Subran.
En caso de que Francia no gane la final, agregó el economista, el impacto sobre la economía será nulo, porque el efecto de euforia no se repercutirá en el consumo.
Se atenuaría el efecto sobre el consumo que se está registrando ahora, señaló Subran, que reconoció que la euforia actual puede tener un impacto a corto plazo.
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Francia vive exaltada por la buena actuación de sus futbolistas en Rusia, como lo demuestra el gran ambiente previo a cada partido o los récords de audiencia que están registrando las televisiones que emiten los partidos.
La semifinal contra Bélgica del pasado martes tuvo la mayor audiencia registrada en el país desde la final del Mundial de 2006, que les bleus, dirigidos entonces por Raymond Domenech en el banquillo, perdieron contra Italia en el que fue el último partido profesional de Zinedine Zidane.
El pasado martes, casi 21 millones de franceses siguieron el partido con Bélgica, algo más del 70% de la cuota de pantalla. Tuvo un pico de audiencia que superó los 22 millones de televidentes.
Visión distinta
Otros estudios se muestran más escépticos sobre el impacto real posible del Mundial para la economía francesa.
El economista del deporte Pierre Rondeau señaló que los gastos suplementarios ligados al Mundial se hacen en detrimento de otros y que, por lo tanto, no acaban impactando en la economía global.
En declaraciones al diario Le Figaro, Rondeu puntualizó que si hay más franceses que van a un bar para seguir el futbol, en paralelo hay menos que van al cine o al teatro; y si se hacen compras televisores nuevos, se dejan de hacer otras porque el poder adquisitivo no ha variado.
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Para Subran, esto último es cierto, pero no tiene en cuenta el incremento de confianza que se traduce en un mayor consumo en detrimento del ahorro.
El Mundial también tendrá un impacto para las arcas del futbol francés, cuya Federación ha recibido ya de la FIFA 24 millones de euros por haber alcanzado la final, a los que se sumarían otros 8 en caso de victoria el próximo domingo. Su presupuesto es de 250 millones de euros.
Los patrocinadores, sin embargo, no pagarán más, porque la Federación había renovado todos sus contratos antes del Mundial, con cantidades fijas que garantizan 70 millones anuales, pero sin cláusulas ligadas a los resultados.
Con una excepción, la marca deportiva que viste a la selección, cuyo contrato supera los 50 millones y que contiene una prima por resultados que no ha sido desvelada.
En cuanto a los jugadores, cada uno de los 23 se ha asegurado ya 239,000 euros a los que se sumarán otros 95,000 en caso de triunfo ante Croacia.
