Publicidad
Publicidad

¡Cuidado, Trump!, la guerra comercial con China es peligrosa

La ausencia de la paz comercial entre China y EU puede dar pie a un caos en los mercados que derive en despidos y presione a la Reserva Federal a ajustar su política monetaria.
mié 08 mayo 2019 05:05 AM
FILE PHOTO: U.S. President Donald Trump looks on as Jerome Powell, his nominee to become chairman of the U.S. Federal Reserve, speaks at the White House in Washington
Con frecuencia, Donald Trump ha pedido a la Reserva Federal que reduzca las tasas de interés ahora para impulsar la economía y el mercado de valores, algo que muchos expertos no consideran necesario.

NUEVA YORK (CNN) - Los inversionistas apostaron el lunes pasado a que Estados Unidos y China alcanzarían una resolución comercial. Pero si los países no logran llegar a un acuerdo, ya tuvimos un vistazo a lo que puede suceder, y puede ser feo.

La reacción inicial de los mercados a las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer aranceles más altos a China hizo que las acciones cayeran en todo el mundo el lunes. El Dow cayó hasta 471 puntos.

Aunque los inversionistas finalmente cambiaron de opinión y se negaron a creer en la fanfarronada, lo sucedido en la mañana del lunes debería enviar un mensaje a Trump: tenga cuidado con lo que desea, señor presidente.

Lee: Trump revive los temores de una guerra comercial

Con frecuencia, Trump ha pedido a la Reserva Federal que reduzca las tasas de interés ahora para impulsar la economía y el mercado de valores, algo que muchos expertos no consideran necesario.

Si Trump sigue adelante con su amenaza, y el caos en el mercado se reanuda, es imposible evitar preguntarse si el presidente finalmente conseguirá los recortes de tasas que está pidiendo; simplemente que con una guerra comercial como catalizador.

Publicidad

Lee: La Fed sufre mayor presión política para bajar el precio del dinero en EU

Si los gigantes del sector empresarial estadounidense comienzan a ver afectadas sus ganancias, podría haber consecuencias importantes. Los ingresos y el crecimiento de las ganancias podrían disminuir. Las acciones podrían descender. Las empresas podrían reaccionar reduciendo los costos, lo que a menudo significa despidos.

Si sumamos todo eso, la Fed súbitamente podría comenzar a preocuparse de que se necesiten tasas de interés más bajas para apuntalar el mercado laboral.

La guerra comercial podría dañar el mercado laboral

El domingo, Trump amenazó con elevar el arancel del 10% sobre productos chinos por un valor de 200,000 millones de dólares al 25%, y sugirió que también podría estar planeando nuevos aranceles. Si China toma represalias imponiendo aranceles más altos, tal medida podría eventualmente perjudicar a decenas de compañías que hacen grandes negocios en China, incluidos los componentes Dow Apple, Boeing, Caterpillar, Coca-Cola y McDonald's.

Trump parece tener la mentalidad de que Estados Unidos tiene la ventaja en sus negociaciones comerciales con China, ya que la economía y el mercado de valores de Estados Unidos se han mantenido bien. Puede que tenga razón, pero las buenas noticias no pueden durar para siempre.

La racha alcista del mercado para comenzar el año pareció mostrar en qué medida Wall Street comenzó a desestimar gran parte de la retórica de Trump. Pero es difícil interpretar a este presidente.

“El desafío para los inversionistas es descifrar si este es otro engaño por parte del presidente, un intento por disminuir las expectativas para brindar una sorpresa positiva o, en realidad, un posible colapso de las negociaciones comerciales y una escalada de la guerra comercial", escribió Mike O'Rourke, director de estrategia de mercado de JonesTrading, en un informe.

Deflación ahora, ¿inflación más tarde?

Después del empleo máximo, el otro mandato de la Fed es la estabilidad de precios o mantener la inflación bajo control. Los precios no han subido demasiado últimamente, y hay quienes temen que la falta de una inflación significativa pueda ser otra razón por la que la Fed tenga que cambiar de dirección y recortar las tasas.

Katie Nixon, directora de inversiones de Northern Trust Wealth Management, llama a esto “stuckflation”, un aumento persistentemente bajo de los precios.

El mayor temor es que esa “inflación estancada” se convierta en deflación. Esa caída en los precios podría hacer que las empresas pospongan las inversiones y que los consumidores reduzcan sus gastos y esperen a que los precios bajen aún más.

Irónicamente, una guerra comercial finalmente podría generar precios más altos, debido a que los consumidores estadounidenses pagarían el precio de los aranceles incrementados sobre los productos fabricados en el extranjero. Eso podría afectar el gasto del consumidor y el crecimiento económico también. En otras palabras, sería otro desafío que podría ser contraproducente para Trump y llevar a la Fed a tasas de interés más bajas.

“Creemos que la economía estadounidense se desacelerará a medida que avance el año”, escribió el director de estrategia global de JPMorgan Funds, David Kelly, en una nota a los clientes el lunes. “Aunque la Fed puede sentirse muy cómoda ignorando los llamados por recortar las tasas actualmente, esos llamados podrían hacerlos más dispuestos a admitir los recortes de tasas más adelante en el año”.

Para agravar el problema, Kelly agregó que recortar las tasas de interés a corto plazo probablemente empeoraría la debilidad económica. Señaló que la gente empezaría a preocuparse más por la posibilidad de una recesión, lo que podría crear una profecía autocumplida.

Los mercados son el tercer mandato de la Fed

Últimamente, pareciera como si la Fed tuviera un tercer mandato no oficial: asegurarse de que los inversionistas permanezcan felices.

El presidente de la Fed, Jerome Powell, frecuentemente ha mencionado como una preocupación el hecho de que los mercados financieros se han vuelto más volátiles. En particular, Powell ha hablado de “contracorrientes” globales que amenazan con descarrilar el crecimiento en Estados Unidos y en los grandes mercados extranjeros.

Powell, para bien o para mal, se ha convertido en el policía del tráfico financiero del mundo, asegurándose de que todos sigan avanzando sin causar accidentes en el proceso.

Eso significa que la Reserva Federal podría verse obligada a recortar las tasas si un hundimiento del mercado bursátil mundial amenaza con convertirse en una desaceleración económica mundial. No importará si la economía y el mercado de Estados Unidos no están tan perjudicados como los de China.

Aun así, habrá afectaciones, pero lo más probable es que sean infligidas por las políticas comerciales de la Casa Blanca, no por la Fed. El banco central se verá forzado a limpiar el desastre.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad