¿Y los países emergentes?
En el seno del G20 se codean países de perfil muy diferente, desde el anciano Japón a los países muy jóvenes como Arabia Saudita, India o Sudáfrica.
La mayor expectativa de vida y el retroceso de la tasa de natalidad contribuyen a una rápida expansión de los jubilados en los países ricos, como Alemania, Francia, España, Italia o Corea del Sur, según la OCDE, que llevó a cabo una serie de estudios sobre el tema.
Este problema se extiende ahora a países emergentes como Brasil y China, remarca. Hacia 2050, el número de habitantes de al menos 60 años en el mundo hará más que duplicarse hasta superar los 2,000 millones.
"El envejecimiento ejerce una presión sobre las finanzas públicas que se traduce en un aumento de los gastos en jubilaciones y salud", explicó el Fondo Monetario Internacional (FMI) en una nota publicada este domingo.
Japón sabe algo del tema, ya que exhibe una enorme deuda equivalente a cerca de 230% de su Producto Interior Bruto (PIB). Una situación que hace que los jubilados ahorren por temor a ver que se recortan sus pensiones, mientras que los más jóvenes rechistan antes de gastar por temor al futuro.
Por otra parte, "la riqueza de estos países terminará por verse afectada forzosamente, ya que cada vez menos personas están en condiciones de trabajar", según el FMI.