La declaración de la Fed cambió poco respecto de la de su reunión de diciembre, diciendo que la tasa actual de fondos federales era "apropiada para apoyar la expansión sostenida de la actividad económica", incluido el crecimiento continuo del empleo y un aumento de la inflación hacia el objetivo del 2% del banco central.
La Fed no mencionó específicamente los riesgos económicos derivados del reciente brote de coronavirus en China, lo que ha llevado a temer una mayor desaceleración en la segunda economía más grande del mundo.
La Fed tampoco dio una nueva guía sobre su práctica actual de comprar 60,000 millones de dólares mensuales de bonos del Tesoro de Estados Unidos para garantizar una liquidez adecuada a corto plazo en los mercados de financiación bancaria. Los funcionarios de la Fed han estado discutiendo cómo y cuándo finalizar el programa temporal y qué tipo de reemplazo permanente podría usar para garantizar el control de la tasa objetivo de fondos federales.
La decisión sobre la tasa de interés era ampliamente esperada, ya que datos económicos recientes muestran que la economía sigue creciendo y no hay señales de que la inflación represente un riesgo que deba contrarrestar con mayores costos de endeudamiento.
“Se necesitaría un cambio dramático en el estado del mercado laboral o en la perspectiva del consumidor para persuadir a la Reserva Federal de que flexibilice la política”, dijo el banco UBS en un análisis más temprano.
La Fed recortó las tasas de interés tres veces el año pasado para impulsar una economía sacudida por las guerras comerciales, y ha establecido una vara alta para cualquier cambio en las tasas este año.
Con información de Reuters