Esta vez, en su reporte Perspectivas de la Economía Mundial (WEO) de abril, el organismo entregó su primera y desoladora evaluación sobre el desempeño económico tras el inicio de las cuarentenas y cierres de negocios en todo el mundo como resultado del COVID-19. A nivel global, prevé una contracción del 3% para 2020.
México, cuyo PIB declinará 6.6% -en comparación con el cálculo previo del FMI de un avance del 1%- aparece como uno de los países más golpeados entre las grandes economías latinoamericanas, afectado por el derrumbe de los precios del petróleo y las consecuencias de la recesión esperada en su principal socio comercial, Estados Unidos.
En tanto, Brasil presentaría una baja de 5.3% en su producción este año, luego de haber crecido un 1.1% en 2019, dijo la entidad, que espera un repunte del 3.4% en la actividad conjunta de la región si se cumple su escenario base de un gradual retorno a la normalidad hacia fines de este año.
"Las economías emergentes y en desarrollo afrontan los impactos más severos si sus condiciones financieras ajustadas persisten o continúan los efectos paralizantes de cierres de negocios y desempleo extendido", dijo Gita Gopinath, consejera económica del Fondo, en el informe.
La entidad sostuvo, sin embargo, que la prioridad de las autoridades debería enfocarse en la contención de la enfermedad, con acciones diseñadas para mitigar los apuros económicos de las poblaciones.