Eurostat sostuvo que se trata de la caída trimestral más aguda desde que el estudio comenzó en 1995. En términos anuales, la caída fue la más pronunciada desde el tercer trimestre de 2009, cuando la producción de la zona euro se redujo un 4.5%.
Francia registró la mayor contracción trimestral, del 5.8%, seguida de Eslovaquia con el 5.4% y España con el 5.2%. La producción económica de Italia se redujo un 4.7%, lo que la sitúa oficialmente en recesión tras una contracción del 0.1% en el último trimestre de 2019.
La mayor economía de la zona euro, Alemania, superó mejor el confinamiento con una contracción del 2.2%, mientras que Finlandia fue el único país de la zona euro que aún logró crecer un 0.1%.
Eurostat dijo que las exportaciones de la zona euro cayeron un 6.2% en marzo como resultado de la pandemia, pero las importaciones lo hicieron aún más, un 10.1% interanual, lo que aumentó el superávit del comercio exterior de la zona euro a 28,200 millones de euros (mde), frente a los 22,700 millones de un año antes.
Aun así, el comercio entre los países de la zona euro se redujo un 12.1% en marzo en comparación con el año anterior, a 153,300 mde, como resultado de las restricciones contra la pandemia de Covid-19.
El empleo en la zona euro cayó un 0.2% intertrimestral en el período enero-marzo, lo que supone el primer descenso trimestral desde que Eurostat inició la serie en el segundo trimestre de 2013, con lo que la tasa de crecimiento interanual del empleo se redujo drásticamente al 0.3%, frente al 1.1% de los tres meses anteriores.