El mandatario justificó su decisión al señalar que Canadá había quebrado el compromiso adquirido "de no inundar" el mercado estadounidense con aluminio canadiense.
El anuncio se produce apenas un mes después de que entrara en vigor el nuevo tratado comercial entre Estados Unidos, México y Canadá, conocido como T-MEC, y que sustituyó tras meses de duras negociaciones al TLCAN, en vigor desde 1994.
Trump impuso aranceles al aluminio canadiense en 2018 pero los retiró el pasado año durante las conversaciones del tratado comercial trilateral.
En su discurso en Ohio, el mandatario repitió su agenda proteccionista de la campaña de 2016 y defendió "el patriotismo frente a las élites globalistas".
"Durante décadas, hemos visto cómo los políticos dejaron que naciones extranjeras robasen nuestros trabajos, saqueasen nuestras factorías, y arrasasen las joyas de la corona de la economía de Estados Unidos", recalcó.
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Por ello, reiteró su "promesa de traer de vuelta empleos y fábricas a EU usando todas las herramientas disponibles: incluidos aranceles, y nuevos tratados comerciales basados en el principio de la justicia y la reciprocidad".
Trump buscará la reelección en los comicios presidenciales de noviembre en los que se enfrentará al precandidato demócrata Joe Biden, en unas elecciones marcadas por la aguda crisis económica y sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus, que ha dejado más de 155,000 fallecidos y millones de estadounidenses desempleados.
“Injustificada e inaceptable”
El gobierno de Canadá, a través de la viceprimer ministra Chrystia Freeland, informó que responderá “dólar por dólar” a la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles de 10% a ciertos productos de aluminio canadiense.
“En respuesta a los aranceles estadounidenses, Canada busca imponer rápidamente contramedidas dólar por dólar”, se lee en un documento difundido en redes sociales por Freeland.
“El anuncio de Estados Unidos de imponer aranceles a ciertos productos de aluminio canadiense, citando preocupaciones de seguridad nacional, es injustificada e inaceptable.
“El aluminio canadiense no mina la seguridad nacional de Estados Unidos. En tiempos de una pandemia global y crisis económica, lo último que quieres trabajadores canadienses y estadounidenses son nuevos aranceles que incremente costos a productores y consumidores”, asegura.